Andrés Quinteros es un psicólogo carlospacense que vive en Madrid desde el 2004. Desde allí nos muestra espectaculares imágenes tomadas por su colega Mar Argüello de lo que es la “nevada del siglo” según los mismos medios españoles.

Foto: Mar Argüello

Encerrado en su departamento de Madrid, ciudad donde reside desde su arribo a Europa,  Andrés Quinteros nos cuenta primero que temprano tuvo que subir y retirar más de un metro de nieve de su terraza. “Ahora llega otro temporal que bajará la temperatura a -11 grados y si se congela esa nieve, puede dañar el techo”, dijo.

Foto: Mar Argüello

El temporal es histórico, son muy pocos o ningunos los registros de tanta nieve en Madrid, por eso la ciudad esta colapsada “Madrid es una ciudad que no está preparada para semejante cantidad de nieve, no es Noruega ni Finlandia”, sostuvo.

Los supermercados están desabastecidos ya que los camiones quedaron varados en las rutas que se volvieron intransitables. “Un montón  de gente tuvo que pasar la noche del viernes en la carretera porque no pudieron llegar a sus casas”, agregó Andrés.

Foto: Mar Argüello

En la ciudad tampoco hay transporte público, las cañerías se congelaron y se agota el gas natural. “Se rompieron muchas calefacciones y yo por suerte tengo eléctrica pero hay gente que incluso se les rompió también, el gas natural escasea y el gobierno recurrió a las reservas”, relató el carlospacense.

Las clases fueron suspendidas y la actividad es casi nula. “Suspendimos las consultas. presenciales en nuestro centro, ya que es casi imposible trasladarse, tanto para nuestros psicólogos como para los pacientes”, indicó el psicólogo.

Andrés repite que están todos sorprendidos por el fenómeno: “se supone que es la nevada del siglo y esta noche se anuncia que hará -11 grados, sería la temperatura más baja desde que hay registros”, dijo.

La terraza antes de que Andrés quitara la nieve

Andrés se despide, tiene que salir a la helada calle para que su perro Sugar haga sus necesidades y de paso corra un poco y juegue en la nieve, los espera una larga y helada noche.