Según el almanaque de la década de 1930 de los granjeros algonquinos, pueblos nativos de Canadá, Estados Unidos y el norte de Coahuila, México, llamaban Luna de ciervo a la luna llena de julio.

El nombre deriva de que, en esta época del año, los nuevos cuernos de los ciervos comienzan a crecer, ya que mudan la cornamenta cada año cuando comienza la primavera y les crece una mayor.

Los nativos también la llamaban luna del trueno debido a las frecuentes tormentas eléctricas de principios del verano.

La luna llena de ciervo de este año no será una súperluna, sino una luna llena normal que podrá verse en todo su esplendor este viernes 23 de julio, en Villa Carlos Paz asomará después de las 18:11pm (hay que tener en cuenta que dependiendo de donde nos encontremos, las montañas la tapan entre los primeros 20 y 50 minutos) y se ocultará mañana sábado 24 a las 8:49 am.

Se trata de una luna llena normal, pero para los pueblos algonquinos tenía un significado especial, ya que simbolizaba el momento del año en el que nuestra fuerza podía renacer, igual que la cornamenta de los venados, por lo que no está de más que la tomes como un momento del año para reorientar todos tus esfuerzos y replantear tus metas.