Una mujer de 54 años fue asesinada de un disparo en la cabeza durante un intento de robo en Carapachay, partido de Vicente López. La víctima, identificada como Silvia Graciela Lepez, era empleada del Banco Nación, abuela y amante de los viajes.
El crimen ocurrió el miércoles por la noche, cerca de las 20, en la calle José Hernández al 5600. Los ladrones circulaban en una Ford Territory blanca, que había sido robada a dos cuadras del lugar donde ocurrió el ataque. Con ese vehículo, interceptaron a la víctima y su pareja. “Los venían siguiendo desde San Martín”, revelaron las fuentes.
La mujer se encontraba dentro de su camioneta junto a su esposo, a metros de su domicilio, cuando los dos delincuentes armados los interceptaron con intenciones de robo. De acuerdo con las pericias, el esposo de la víctima intentó evadirlos con una maniobra y fue en ese momento que les dispararon.
Según fuentes de la investigación, la mujer se resistió al asalto y el proyectil impactó en la zona occipital izquierda. Su marido intentó trasladarla de inmediato a la Clínica Independencia, con la asistencia de móviles municipales que le abrieron camino. Sin embargo, debido a la gravedad de las heridas, murió tras llegar al centro de salud.
Los ladrones, tras el disparo fatal, huyeron rápidamente, y a unas tres cuadras, en Misiones y Porchia, asaltaron a otro conductor y le robaron su camioneta. Luego escaparon hacia San Martín.
Las imágenes registradas por las cámaras de seguridad de la zona muestran a los ladrones escapando junto a sus cómplices en un auto Toyota Corolla. Se intenta identificar a los delincuentes, que son intensamente buscados.
Silvia Graciela Lepez tenía 54 años y, según fuentes policiales, era tesorera del Banco Nación. Las víctimas estaban en la puerta de su casa. Vivían junto a su hijo de 23 años y este miércoles regresaban desde el supermercado cuando fueron interceptados por al menos dos asaltantes.
Al intentar escapar, los delincuentes dispararon. La bala ingresó por el asiento del acompañante y le pegó a la mujer en la cabeza.
Silvia tenía también otro hijo de 30 años y un nieto de 11. En sus redes sociales compartía fotos de sus viajes por distintos lugares del país junto a su pareja.
El mayor, Nicolás, habló con la prensa y contó que sus papás “volvían del gimnasio y estaban estacionando” cuando se produjo el hecho.
“Era una persona que siempre estaba para el otro, no se merecía lo que le hicieron. Siempre daba hasta el último centavo, prestaba el oído. Era más que una excelente persona, madre y abuela”, expresó y agregó que los ladrones eran mayores de edad.
La investigación quedó a cargo del fiscal de Vicente López Gastón Larramendi y de la Subdelegación Departamental de Investigaciones (Sub DDI) de Vicente López.