Hernán Sánchez era fotógrafo y frecuentaba todos los boliches nocturnos de Carlos Paz para hacer su trabajo. La madrugada del 19 de diciembre de 2014 se fue del departamento en el que vivía después de compartir la noche con dos amigas rosarinas. Nunca más volvió.

Su familia y sus amigos de Tanti, ciudad de la que era oriundo, denunciaron su desaparición y comenzaron a marchar para pedir que la Policía se moviera en la búsqueda.

Se abrió una investigación pero nada prosperó. La angustia continuó latente hasta que llegó uno de los días más trágicos en la historia de Carlos Paz: el 15 de marzo de 2015.

Dos días antes había desaparecido Andrea Castana en el Cerro de la Cruz. La mujer había dejado a sus dos hijos en el colegio y no volvió a retirarlos para llevarlos a casa. Esa tarde había subido al Cerro para hacer ejercicio. Y nunca bajó.

Al mediodía, con el sol sobre las cabezas, un grupo del Cuerpo Especial de Policía que trabajaba en la búsqueda de Andrea encontró el cuerpo de un hombre en una quebrada que da a la calle Rioja, sobre la zona del Cerro. La documentación que se encontró en el lugar confirmaba que se trataba de Hernán Sánchez, el fotógrafo desaparecido en diciembre. Horas más tarde, una pareja encontraría el cuerpo de Andrea en una de las estaciones del Cerro.

Mucho se dijo del caso y el fiscal Ricardo Mazzuchi decidió pasarlo a archivo caratulándolo como un suicidio. La familia con su abogado apeló esa decisión y hoy el tema está en el Tribunal Superior de Justicia. Los Sánchez están seguros de que a Hernán lo mataron y se basan en la primera autopsia que se le practicó al cuerpo en la que se detectó una herida cortante en la zona del estómago.

La pista de Los Monos

La posible vinculación con un crimen mafioso comenzó con una versión periodística. Se planteaba que las jóvenes que estuvieron con Hernán tenían relación con la banda de Los Monos, algo que no llegó a comprobarse. Las dos mujeres prestaron declaración testimonial en la Fiscalía del Segundo Turno.

Allegados a Hernán creen que no se quiso investigar nada a fondo y que a la Justicia le convino más hacer pasar el hecho como un suicidio. Algo que quienes conocían a Hernán, y sobre todo quienes hablaron con él en las últimas horas en las que se lo vio con vida, nunca creerán.

Este sábado, un informe publicado por el diario La Voz, da cuenta de que la investigación por el lavado de dinero del narcotráfico que se centra en la banda rosarina de Los Monos determinó que el cabecilla, Ariel “Guille” Cantero, tiene dos propiedades en Villa Carlos Paz.