Una vez más, un sistema de inteligencia artificial superó a un humano en el tablero del milenario juego go ya que hoy el número uno de la disciplina, el chino Ke Jie, perdió por sólo un cuarto de punto frente a AlphaGo, un software diseñado por Google.

El enfrentamiento, que fue el primero de cuatro partidas, duró cuatro horas y media y mantuvo la igualdad de juego en todo momento.

Sin embargo, la máquina -que manejó las fichas blancas- derrotó a Ke Jie -que movió las fichas negras- por solo un cuarto de punto.

“Los jugadores argentinos nos quedamos trasnochando, cada uno desde su casa, viendo el juego por YouTube, mientras comentábamos los movimientos en un grupo de chat. Todos hicimos hinchada por Ke Jie”, comentó a Télam Santiago Laplagne, presidente de la Asociación Argentina del Juego Go (AAGO).

Asimismo, destacó las oportunidades de aprendizaje que brinda este tipo de eventos porque los sistemas de inteligencia artificial generan nuevos movimientos y estrategias, que luego los humanos incorporan a sus partidas.

“Por ejemplo, en algunos torneos a veces miramos a algún jugador y decimos ‘ahí hizo un movimiento de AlphaGo'”, relató el directivo de esta asociación sin fines de lucro, ubicada en la Ciudad de Buenos Aires, que también integra Fernando Aguilar, campeón argentino y repetido campeón sudamericano desde 2001.

La atmósfera del juego que hoy tuvo lugar en el centro de convenciones de Wuzhen, un tradicional pueblo de canales en el este de China, era similar a la de los grandes torneos de ajedrez, con periodistas y expertos que comentaban cada jugada de Ke y AlphaGo.

Mientras, millones de personas seguían el juego por televisión -la estatal china CCTV- o Internet en países como China, Japón o Corea del Sur, donde el go es uno de los deportes más populares.

“En Occidente, las personas suelen empezar a jugar go cuando están en la universidad. Mientras que en Oriente es una disciplina muy popular por eso comienzan desde chicos”, indicó Laplagne, y agregó que en la asociación argentina hay 60 miembros, mientras que en los torneos la cantidad sube a 80.

El flamante vencido por la máquina tenía cinco años cuando ya ganaba torneos nacionales y con 19 es considerado el mejor del planeta. Por eso finalizó la partida incrédulo por lo ajustado del marcador y visiblemente agotado.

Pero la victoria de AlphaGo en el cronómetro fue indiscutible, movió sus fichas en un lapso de tiempo tres veces menos que su rival de carne y hueso.

“Ha sido un enfrentamiento increíble, el más igualado que podría haber sido”, comentó en la conferencia de prensa posterior a la partida el investigador británico Demis Hassabis, quien fue un niño prodigio del ajedrez y ahora lidera el equipo DeepMind, desarrollador de AlphaGo para Google, según informó hoy la agencia EFE.

En este sentido, Laplagne remarcó que la noticia de que una máquina derrota un humano lleva como consecuencia que mucha gente se entere de la existencia de Go, y también incrementa el entusiasmo por aprender su mecanismo, que es más complejo que el ajedrez.

“Si bien el go es parecido al ajedrez, difiere en que cuando uno mueve las piezas -en una de las 361 intersecciones- del tablero luego quedan fijas y van rodeando lo que se llaman territorios. Así, gana el que acumula más puntos en su territorio”, explicó el argentino.

El número de jugadas iniciales posibles en el ajedrez es de 20 y el de segundos movimientos es 400, mientras que en el go ya puede haber unas 130.000 combinaciones diferentes tras dos lances.

El jugador argentino recordó, además, que la gran sorpresa de una victoria de este tipo se la llevó la primera vez que una versión de AlphaGo superó a un hombre.

En este punto, la versión de este sistema que se enfrentó contra Ke es una mejora de la que derrotó en 2015 por 5-0 al jugador de origen chino afincado en Francia Fan Hui, campeón de Europa, y de la que en 2016 ganó por 4-1 al surcoreano Lee Sedol, 18 veces campeón mundial, duelos que fueron seguidos por unos 300 millones de espectadores.

La gran atención mediática que despertó esta noticia también llega dos décadas después de las famosas partidas de la supercomputadora Deep Blue contra el genio del ajedrez ruso Gary Kasparov en 1996 y 1997.

En la partida de hoy, y en representación de AlphaGo, no jugaba un artefacto robótico, sino una persona que recibía a través de mensajes de computadora los movimientos sugeridos por la inteligencia de Google y los copiaba en el tablero ante el chino.

“Una partida regular de go suele durar aproximadamente una hora. Pero en los torneos se puede incrementar a casi tres”, señaló Laplagne, quien consideró que todo aquel interesado por comenzar a jugar puede hacerlo.

“No hay requisitos especiales para empezar, sino simplemente interés por este juego que integra análisis, creatividad y arte”, describió el presidente de la asociación que en su sitio web informa los clubes para aprender en todo el país (http://www.go.org.ar/argentina.php)

Por lo pronto, Ke disputará su segunda partida con AlphaGo el jueves, mientras que la tercera y última llegarán el sábado con más expectativa que nunca.