Por Sol Castro y Juan Alberto Pereyra.

Ariel Tarico, el santafesino de 34 años que se convirtió en uno de los imitadores más reconocidos y populares de la Argentina, el hombre que brilla durante el verano carlospacense en el espectáculo de Fátima Flórez, Fátima es Mágica, con personajes como Luis Ventura y el presidente Mauricio Macri, es también locutor.

“Me gustaría trabajar en la radio con mi propia voz y no haciendo otras voces, porque soy  locutor, quiero hacer publicidades y trabajar en cine”, confesó el artista en entrevista con Carlos Paz Vivo!

En esta temporada de verano, obtuvo los premios teatrales para los cuales fue nominado. Recibió el Premio Vos  por  su labor destacada en show y el  Premio Carlos a Mejor Imitador. Durante todo el 2018 lo pudimos ver junto al periodista Nelson Castro haciendo de Nelson K, su doble contrario a nivel político en Bella tarde, programa de televisión de TN; y en Carlos Paz, actualmente divierte al público y permite que éste haga catarsis colectiva con sus desopilantes personajes.

Además, en relación a los próximos pasos en su carrera, Ariel comentó que aunque no busca hacer enseguida un trabajo dramático, piensa que su labor actual podría derivar en alguna participación en una comedia, para poder interpretar otro tipo de personajes, o formar parte de propuestas diferentes a las que hace hoy por hoy.

¿Cómo se construyó el propio Tarico a lo largo de estos años como artista? El actor aseguró que haber trabajado con grandes maestros fue muy importante, ya que cada uno le dejó algo especial.

Juan Carlos Mesa  le enseñó a trabajar con puntualidad, generosidad y humildad. “Consideraba a Juan Carlos como mi ídolo desde que era un niño, cuando lo veía en Mesa de noticias y El gordo y el flaco”, recordó con cariño.

Y agregó:  “Con Mesa aprendí  también a ser cuidadoso y detallista, con Lalo Mir, a delirar más con mis personajes, con Nelson Castro siempre hubo una confianza impresionante, es un grande de verdad, muy generoso, un tipo sin ego, que nunca me preguntó previamente lo que iba a decir al aire”.

A los personajes los construyo con la gente día a día

¿Cómo te definís?

-Soy imitador, caricaturista, de chico soñaba con dibujar caricaturas y publicarlas en los diarios y las revistas. Por más que ahora no dibuje tanto, la caricatura me sigue en el escenario, trato de hacer un personaje aparte del personaje real, que sea divertido y que tenga opinión.

¿De qué manera construís tus personajes?

-Para Fátima es mágica hicimos el guión junto a Norberto Marcos. Yo le pasé algunas ideas y él terminó de redondear los sketches. Después, los fuimos construyendo con la gente día a día, es decir, hay una base desde la cual podemos jugar, una red para hacer piruetas. Luego les voy sumando datos de actualidad a los personajes.

¿Cuál es el personaje que más te divierte hacer?

-Luis Ventura y Nelson K. Jugar con Nelson Castro fue algo muy importante en mi carrera, porque me dio mayor visibilidad para luego empezar a crear otros personajes, pero en el teatro disfruto todo, porque me gusta mucho el escenario, y eso que todavía me falta mucho por aprender. No me pongo un techo en el teatro. En radio laburé con grandes como Lalo Mir, Chiche Gelblung, Magdalena Ruiz Guinazú, con Roberto Pettinato.  Yo me decía: ¿después de esto, qué? Y muchos me respondieron que se venía mi propio programa de humor. Es algo que todavía tengo pendiente.

Del recuerdo de sus maestros al deseo de hacer cine