Foto a modo ilustrativo.

Los catorce jardines maternales privados de Villa Carlos Paz, a casi dos meses de decretarse el Aislamiento social, preventivo y obligatorio por el Gobierno nacional, y a pesar de haber visibilizado su situación de emergencia económica, no obtuvieron ningún tipo de respuesta del estado municipal, provincial u otros organismos ante los cuales presentaron sus reclamos.

“La situación es muy difícil. Nosotros no recibimos subvención del Estado ni de ningún otro tipo. Vivimos con una gran incertidumbre por lo económico y, además, no sabemos ni cuándo ni de qué manera podremos volver a trabajar”, comentó Yanina Gelpi, dueña y directora del nuevo Jardín con orientación artística Kumbalele, de Costa Azul, en conversación con Carlos Paz Vivo!

Por su parte, Gloria Wendler, del Jardín Garatulitos (8 años de trayectoria), de barrio Los Manantiales, manifestó: “Trabajamos en conjunto en esta pandemia para que comprendan cómo estamos. Lo que esperamos es que con los protocolos de seguridad e higiene necesarios podamos abrir nuestras puertas en función de las demandas que tienen las familias que asisten a nuestros jardines”.

Y añadió: “Hoy hay muchas familias que ya han comenzado a retornar a sus trabajos y han tenido que contratar niñeras para que puedan cuidar a sus niños, siendo que nosotras tenemos cerradas nuestras puertas”.

Necesidad de una respuesta

Yanina Gelpi inauguró su jardín el 9 de marzo pasado con 4 docentes. “Aposté a la educación, con todo el corazón, una inversión muy grande incluido alquiler, y una semana después, habiendo logrado que 8 familias apostaran por nosotros, tuve que cerrar el Jardín”, contó la maestra.

En el caso de Gloria Wendler, espera una respuesta del tipo de sea por parte del municipio, “No estamos en contra de éste. Queremos sentirnos acompañadas y no abandonadas como hasta el momento, deseamos haya un diálogo para buscar una solución en conjunto”.

Al respecto, Yanina sostuvo: “No encontramos muchas salidas. Sabemos que no es solo nuestro problema, pero necesitamos un subsidio, ayuda, o por lo menos una respuesta que nos contenga de parte de las autoridades, para ver qué hacer. Mi temor es tener que cerrar el emprendimiento que comencé”.

Además, señaló: “Al principio mandamos nota al Intendente de la ciudad, a gente del área de educación, necesitábamos alguien que nos pueda escuchar que aún no apareció. Hicimos notas con periodistas para visibilizar la situación. Los padres no pueden seguir pagando las cuotas de manera solidaria, ese es otro problema”.

Unidas para lograr respuesta

Cabe recordar que todos los jardines de la ciudad adhieren a los reclamos de ACIJAM (Asociación de Jardines Maternales Privados) asociación que elevó la situación actual de éstos, a autoridades nacionales, provinciales y municipales, legisladores, a Sadop (gremio de docentes privados), y al Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad social de la Nación, entre otros.

Según estiman las directoras de los Jardines maternales privados, es probable se permita la apertura de los jardines recién en el mes de septiembre.

Actualmente, la idea de estas instituciones es abrir los Jardines antes de ese mes, con un protocolo preventivo de salud, que evite contagios por Covid-19. Asimismo, sostienen que otro problema importante es que no son considerados como integrantes del sistema educativo general.

“Para la Municipalidad somos comercios, pero no nos dejan abrir como a otros. El sistema educativo no reconoce al Jardín maternal privado. No tenemos apoyo de ningún lado. Por eso, desde Córdoba, el ACIJAM pensó junto a especialistas en un protocolo para que pueda ser evaluado por el COE (Centro de Operaciones de Emergencias) de la zona”, señaló Yanina.

Subsistencia

Según contaron ambas directoras, cada jardín realiza diferentes actividades para la subsistencia como vender bolsones de frutas y verduras, pollo, kits artísticos con pintura y masa para ofrecer por Internet y otros productos alimenticios.

Por otro lado, afirmaron que el crédito que ofrece el Gobierno nacional para los monotributistas C y D, no se ajusta a las necesidades y realidad de sus organizaciones.

¿En qué consiste el protocolo?

El protocolo de seguridad e higiene en el cual trabajaron los jardines privados, apuntan a que se pueda regresar cuanto antes a la actividad.

“Tiene que ver con el control completo de la higiene en forma constante dentro de la institución y previo a ingresar a ella. Hay cosas que debemos modificar dentro de cada lugar”, aseguró Gloria Wendler.

Luego explicó: “Al llegar los niños, se haría la primera desinfección tanto de las prendas  en general, como de los objetos que trae. Tras ingresar al jardín, se efecturía una nueva higiene. Se trabajarían con grupos reducidos, evitando los juegos en rincón, donde los chicos toman más contacto entre ellos”.

En cuanto a las maestras jardineras o adultos que trabajen en el Jardín, harán una declaración jurada al ingresar en la que cada uno manifestará su estado de salud, además de cumplir con todas las medidas preventivas y realizar un cambio de ropa y desinfección previa.

“Los niños irían rotando dentro de la institución cada 40 minutos o una hora, como para poder hacer la desinfección de los espacios, para que luego puedan continuar con las actividades. También se tomará la fiebre al ingresar y egresar y sola una persona será la encargada de conducir a los niños hacia el interior del jardín o cuando salen de este, a la hora que los buscan sus padres”, detalló la directora.

El nuevo protocolo sería informado a las familias a través de videos, mostrando además las nuevas formas de saludo entre los niños y con las docentes.

Campañas con artistas

Diferentes artistas a nivel provincial, nacional y local, acompañan a los Jardines privados con mensajes a través de videos con el slogan: “Yo defiendo al Jardín Maternal”.