Un sospechoso baleado e internado en estado reservado, y con custodia, y un policía golpeado en el rostro fue el serio saldo de un violento asalto, seguido de una impresionante persecución que se extendió por la zona norte de la ciudad de Córdoba.

Si no hubo que lamentar víctimas inocentes en el episodio, a tenor de la forma en que iba el auto de los ladrones y los policías detrás, fue por pura fortuna.

El caso terminó, a su vez, con dos sospechosos de robo detenidos, quienes están fuera de peligro.

Todo se inició el miércoles 9 pasadas las 18.30 cuando dos ladrones armados y, con sus rostros a la vista, entraron a robar en una peluquería ubicada en la avenida Donato Álvarez al 7100, en barrio Argüello, al noroeste de la Capital.

El cliente menos pensado

Los delincuentes no sabían que el cliente que era atendido era nada más y nada menos que un agente de policía.

El joven efectivo estaba de civil y, aprovechando su jornada de franco, había ido a cortarse el pelo.

De acuerdo a la versión oficial, al advertir lo que sucedía, el policía no dudó en identificarse y enfrentarse a los ladrones, con su arma, dentro del mismo negocio.

“El policía se identificó como tal y hubo un forcejeo. En esas circunstancias, uno de los sospechosos terminó herido de un disparo en el abdomen… Y el agente terminó golpeado en la cabeza con un objeto contundente”, explicó el comisario Gustavo Piva, jefe de la Zona Norte de Seguridad a La Voz.

“Tanto el ladrón herido como su cómplice escaparon corriendo”, añadió el funcionario policial.

El peluquero y otros clientes se tiraron al suelo.

Sin perder un segundo, los maleantes subieron a un Citroën C4, bordó, donde los esperaba otro cómplice y escaparon.

Los ladrones alcanzaron a robarle la pistola al policía, pero se les cayó el cargador.

El agente golpeado (quien se desempeña en la Policía Barrial y es recientemente egresado) alcanzó a comunicarse con sus superiores y dio el alerta.

Cacería

Los ladrones tomaron por avenida Ricardo Rojas y a la altura del 7400, dos de ellos alcanzaron a bajarse para intentar escapar.

Uno de ellos no pudo llegar muy lejos: era quien estaba baleado.

Una patrulla policial, que ya había sido alertada por el robo y se había sumado a la persecución, logró detener al sospechoso.

Fue identificado como Carlos Javier Puchi (28), quien tiene domicilio en el barrio SEP, según informaron fuentes policiales.

El sospechoso cuenta con antecedentes por robo calificado.

Con un disparo en el abdomen, fue trasladado al Hospital de Urgencias, donde quedó internado con pronóstico reservado.

En tanto, el otro sospechoso alcanzó a correr unas cuadras hasta la calle Heriberto Martínez, siempre en Argüello, donde finalmente fue detenido.

El acusado también es mayor de edad y estaba ileso.

Persecución y más balas

A todo esto, el Citroën C4 bordó siguió en plan de escape.

No está claro si en el coche iba además un ocupante extra.

Lo concreto es que quien manejaba aceleró a fondo y comenzó a huir a toda velocidad por distintas arterias de la zona norte de la Capital, en dirección hacia la avenida de Circunvalación.

La fuerza policial desplegó un impresionante operativo en el que participaron varios móviles de las patrullas, de la Barrial y hasta de la Caminera.

El momento de más tensión se vivió en la intersección de la Circunvalación y la avenida Sabattini, donde a esa hora se registraba un alto movimiento vehicular.

Fue entonces que, en medio de tantos autos de simples vecinos que se encontraban detenidos, pasó el auto fugitivo seguido muy de cerca por varios patrulleros.

Mientras, otros uniformados que se encontraban parapetados con armas largas abrieron fuego contra el rodado bordó.

El video casero, registrado por un vecino, capta la impactante balacera contra el auto.

El Citroën C4 finalmente fue detenido y el conductor terminó atrapado. En el rodado, que no tenía pedido de captura por robo, se secuestró un revólver calibre 22.

Se recuperó el arma policial

Asimismo, dentro del mismo vehículo se terminó encontrando la pistola reglamentaria Bersa, calibre 9 milímetros, que le había sido sustraída al agente policial en la peluquería.

El efectivo fue atendido en Policlínico Policial dado que presentaba algunas lesiones en el rostro producto de los golpes que sufrió en la peluquería.

Fuentes oficiales indicaron que se encuentra fuera de peligro.

Respecto al sospechoso baleado (Carlos Javier Puchi), se indicó que recibió un impacto en el abdomen y quedó internado en estado complicado y con pronóstico reservado en la terapia intensiva del Urgencias. Quedó con custodia.

Fuente y foto: LaVoz.