Julian Assange, el fundador de WikiLeaks fue liberado este martes de una prisión británica después de llegar a un acuerdo con el Departamento de Justicia de EE.UU.
Assange se declarará culpable de un solo cargo de conspiración para obtener y difundir información de defensa nacional, lo que pondrá fin a una prolongada batalla legal y le permitirá regresar a Australia.
El caso de Assange ha generado un intenso debate internacional sobre el equilibrio entre la libertad de prensa y la seguridad nacional. Mientras que algunos lo ven como un héroe de la transparencia que expuso presuntos crímenes de guerra, otros lo consideran un provocador irresponsable que puso en peligro vidas y comprometió la seguridad nacional.
La experta independiente en tortura de la ONU, Alice Jill Edwards, instó a las autoridades británicas a detener la extradición de Assange a EE.UU., advirtiendo que podría ser sometido a un trato equivalente a tortura y que su salud mental y física podría verse “irreparablemente dañada”.
Fuente: El Litoral