El nuevo equipamiento para hacer estudios genómicos a gran escala del SARS-CoV-2 que adquirió Argentina con una inversión de un millón de dólares, y que es el primero de toda Sudamérica, ya se encuentra en el Instituto Anlis-Malbrán y permite analizar 6.000 muestras por semana, informó en un comunicado la Jefatura de Gabinete de la Nación.

La máquina de última generación se llama CovidSeq y vigila minuto a minuto las eventuales mutaciones del coronavirus.

El equipo, que fue adquirido a la empresa estadounidense Illumina por un valor de 992.600 dólares, cuenta con un peso aproximado de 600 kilos, y un tamaño similar al de un cajero automático.

Hasta ahora, en el país, sólo se han detectado dos casos positivos con mutaciones, indicó el comunicado oficial.

La tecnología de este nuevo equipamiento, además de secuenciar el genoma del virus, puede diagnosticarlo; es decir determinar si la muestra es positiva y también la variante a la que pertenece.

La sensibilidad del diagnóstico que otorga es del 99,7 por ciento, por lo que reduce casi al mínimo la posibilidad de que ocurran falsos negativos. A diferencia de otros análisis, este sistema evalúa 98 regiones del virus para dar el resultado.

Además de vigilar la efectividad de las vacunas a partir de las mutaciones que aparezcan, detectar las nuevas cepas resulta clave para determinar, por ejemplo, la causa del crecimiento de los contagios, ya que las mismas pueden responder a un relajamiento de las medidas de prevención o a la aparición de una variante que posee mayor transmisibilidad, agregó el comunicado.