El hecho ocurrió mientras el propietario no estaba en su casa. Para el damnificado alguien “lo entregó”. La Policía no pudo tomar huellas dactilares, ya que usaron guantes de latex.

Un vecino de nuestra ciudad, que vive en calle Villalobos y Buenos Aires, en barrio La Cuesta, salió a cenar el viernes cerca de las 22 y cuando regresó a su casa alrededor de la 1.30 de la madrugada del sábado, se encontró con todas sus pertenencias revueltas.

“Entre al comedor y estaba la heladera abierta, miré para la habitación de mi hija y estaba hecha un desastre, al igual que la mía”, indicó el damnificado, Raúl Cornaglia.

Quien acotó que le hicieron un “daño terrorífico”. Y señaló que no es una persona “adinerada”, y se dedica a la compra y venta de automóviles y a la vez, es gestor.

“Me robaron mucho dinero, y cosas personales Fueron 12 mil dólares, mil euros, 400 mil pesos, y a medida que iban buscando cosas, se llevaron objetos de valor”, detalló.

 

También se robaron relojes, entre ellos, uno de marca Rolex, perfumes importados sin abrir, lo que llamó la atención al propietario, ya que había imitaciones y no se las llevaron. Además, robaron ropa y zapatillas sin estrenar y también usadas, una impresora, notebook y una play.

Cornaglia contó que ingresaron a su vivienda por un terreno baldío colindante. Forzaron las rejas de una ventana con un gato hidráulico y tras revisar todo y hacerse del botín, salieron por una puerta que estaba cerrada solo con trabas.

La propiedad tiene un sistema de alarma sonora y según comentó el damnificado, la arrancaron completa.

Tras la denuncia, llegó la Policía a levantar huellas, pero “no pudieron hacerlo, ya que estas personas trabajaron con guantes de latex”, dijo.

El hombre dejó entrever que alguien brindó el dato de que tenía ese dinero en su casa. “Calculo que hay una persona allegada a mí, que tomamos café o algo por el estilo, porque no fue un robo al voleo”.

Y se preguntó “de quien dudo, de todo el mundo. No soy de contar lo que tengo, pero es así”, finalizó.