La amistad para toda la vida es una de las promesas que de niños muchas personas juran. Pero a veces la misma vida hace que no puedan cumplirse, porque las obligaciones y responsabilidades de la adultez los distancian. Pero este no es el caso de Rita, Dorita, Susana, María Angélica y Rosa, quienes pese a que tomaron caminos diferentes hicieron de la amistad un culto. Desde hace 70 años se volvieron inseparables y eligieron Villa Carlos Paz para celebrar esta unión.
Se egresaron como peritos mercantiles en el año 1953 de la escuela Nuestra Señora del Calvario de Santa Fe Capital; pero la amistad las unió cinco años antes, en 1948, cuando comenzaron a cursar sus estudios secundarios.
Así comenzó una hermosa historia de amistad a la que en este fin de semana le están haciendo honor con un encuentro en Villa Carlos Paz, ciudad elegida por las amigas para juntarse y recordar los buenos momentos compartidos.
“Somos amigas desde hace apenas 70 años. Esto quiero que lo vean las personas mayores como nosotras, que se animen a buscar a sus compañeras, a reencontrarse porque es precioso. Y ya que Carlos Paz recibe a todos los egresados del primario y secundario, está bueno que también reciba a las egresadas de más de 50 años recibidas, como nosotras”, expresó Rita Bolcatto, la anfitriona en esta oportunidad.
En tanto, Dora Bonazola contó que si bien son todas de Santa Fe, con el correr de los años fueron tomando distintos caminos, al punto que sólo dos viven actualmente en aquella provincia, y las demás residen en Mendoza, Córdoba capital y Villa Carlos Paz.
Por otro lado, Susana Coppa destacó: “La amistad persiste por lo que sembramos cuando éramos chicas. Fuimos muy compañeras, sumamente unidas, nos queríamos muchísimo y jamás nos hemos peleado. El recuerdo es tan fuerte, que al recibir la convocatoria no podes negarte. Por eso, cuando hay una verdadera amistad, un verdadero cariño, no se borra nunca”.
Aunque en tono picaresco y con la risa entre dientes, María Angélica Lotenzutti detalló: “Nunca nos hemos peleamos pero por ahí algún novio nos robamos”.
“Creemos que la adolescencia nos marcó, porque todas seguimos siendo iguales que cuando teníamos 17 años. No hemos cambiado el carácter, así que nos conocemos mucho”, dijo Rosa Grassi sobre la relación con sus amigas.
Y como no puede ser de otra manera, entre recuerdo y recuerdo siempre aparecen las anécdotas que marcaron a fuego su amistad; como la que contó Dora: “Una vez nos quisieron echar del colegio culpa de Rita, porque nos prestó un salón, hicimos un baile y eso era pecado. Me llamaron para confesar, y yo negué todo”.
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