Cuando el coronavirus arribó al país, las autoridades sanitarias comunicaron que la única manera de combatirla era mediante el distanciamiento social, lo que derivó a que gran parte de la población se encierre en sus hogares para cumplir con el aislamiento social preventivo y obligatorio.

En este contexto, la Universidad Argentina de la Empresa (UADE) y Voices realizaron un nuevo estudio de opinión pública a nivel nacional con el objetivo de comprender opiniones, actitudes y percepciones de los argentinos respecto de la pandemia de COVID-19 y su impacto en la sociedad, con especial foco en los efectos psicológicos derivados de la situación.

El impacto psicológico de la pandemia

La preocupación y otros calificativos negativos priman al definir el estado de ánimo de la población. La preocupación (mencionada por el 9% de los encuestados), el cansancio o decaimiento (8%), y la tristeza (7%) ocupan 3 de los primeros 5 lugares. En cuanto a los sentimientos positivos, más específicamente la esperanza/optimismo (8%) y la tranquilidad (7%) ocupan en conjunto el 15% del total de menciones, contra el 48% de aquellos sentimientos de acepción negativa.

En promedio, los consultados calificaron su estado de ánimo durante la última semana en 5,8 puntos, advirtiéndose un estado de ánimo general de la sociedad poco satisfactorio. Quienes mejor estado de ánimo general expresan en promedio son los hombres, los ciudadanos de mayor edad y de mayor nivel educativo, mientras que las mujeres, los más jóvenes y aquellos de menor nivel educativo expresaron estados de ánimo más críticos.

Mientras que 7 de cada 10 ciudadanos (69%) se consideraron muy o bastante preparados para afrontar la situación, el 31% restante se sintió poco o nada preparado al respecto. Los hombres (34%), los más jóvenes (41%), aquellos de menor nivel socioeconómico (36%) y educativo (33%) y quienes comparten su hogar con otras personas (33%) se reconocieron como los menos preparados.

Factores que afectan a la población de forma negativa

Las necesidades económicas fueron el principal factor destacado por los encuestados en el contexto actual. El 58% de ellos lo destacaron como lo que peor impacto está ocasionando en sus vidas. Esta percepción es incluso más alta entre los hombres (61% vs. 55% entre las mujeres), quienes pertenecen a los sectores socioeconómicos más bajos (67%) y quienes viven solos (22% vs. 14% de quienes viven en pareja y 16% de quienes habitan con un grupo familiar). Por su parte, esta percepción disminuye entre los ciudadanos de más de 50 años (48%) y de mayor nivel educativo (47%), aunque también resulta la principal preocupación.

En segundo lugar, el 15% de los respondientes destacaron el impacto de las cuestiones físicas o de salud relacionadas con la edad como principal factor negativo. Como es de esperarse, esta percepción primó entre los ciudadanos de mayor edad. El 22% de los mayores de 50 años reconocieron este factor como el de principal impacto, frente al 12% de quienes tienen entre 30 y 49 años y el 10% de quienes tienen entre 16 y 29 años.

En tercer lugar, un 13% de los consultados mencionaron en primer lugar las incomodidades propias de su hogar como el factor de mayor impacto negativo durante este período. Este aspecto es principalmente destacado entre los más jóvenes (21% de quienes tienen entre 16 y 29 años así lo reconocieron) y quienes habitan en su hogar con un grupo familiar (25% vs. 9% de quienes viven solos o el 14% de quienes viven en pareja).

También se destacó el sentimiento de soledad, con 11% de alusiones sobre el total de los encuestados. Esta dimensión concentró respuestas principalmente entre los más jóvenes (14% de quienes tienen entre 16 y 29 años destacaron el efecto negativo de este factor, frente al 12% de quienes tienen entre 30 y 49 años y el 8% de quienes tienen 50 años o más).

Relaciones humanas en tiempos de pandemia

Nueve de cada 10 argentinos (87%) mantienen buenas relaciones con quienes están compartiendo su hogar durante la pandemia de COVID-19, percepción que es más común entre los mayores de 50 años (95%), los ciudadanos de nivel socioeconómico más alto (93%) y de mayor nivel educativo (94%).

Aquellos que habitan únicamente con sus parejas son quienes mayores niveles de satisfacción en la convivencia diaria expresan (94%), porcentaje que desciende al 88% de quienes habitan con un grupo familiar junto con padres, madres y/o hijos y al 74% entre quienes conviven con un grupo no familiar (amigos o conocidos).

Por otro lado, ocho de cada 10 argentinos (80%) afirman que se comunican frecuentemente (muy o bastante) con sus amigos o familiares, mientras que otros 2 de cada 10 (20%) dicen hacerlo poco o nada. Los niveles de comunicación son más altos entre las mujeres (82% vs. 77% hombres), los mayores de 50 años (90%), los ciudadanos de mayor nivel socioeconómico (91%) y de mayor nivel educativo (89%).

Fuente: Infobae.