A casi seis meses de la pandemia y con un panorama sanitario, económico y social todavía incierto en el país y en Villa Carlos Paz, particularmente afectada por tratarse de una ciudad turística, la necesidad de la gente de distintos sectores sociales, principalmente los más vulnerados, se hace sentir más que nunca.

A pesar de las ayudas del Estado nacional, la solidaridad de vecinos, comerciantes y las acciones sociales concretas del estado municipal destinadas a los que menos tienen, la situación sigue siendo crítica en algunos barrios, donde faltan alimentos y acceso a fuentes laborales.

En relación a la situación social, Silvia Suárez, vecina de Barrio Colinas, creadora y quien lleva adelante el merendero Solecitos Naranjas (hace 11 años) ubicado en el sector llamado Las Latitas, contó en conversación con Carlos Paz Vivo!: “Nosotros asistimos ahora a 64 familias, 25  familias más de las que solíamos ayudar antes de la pandemia. Todos los jueves de 15 a 18,30 hs, entregamos alimentos a las madres que vienen. Pan, leche, pizzas, y todo aquello que se pueda juntar”.

Por otro lado, Silvia aseguró que la gente está muy preocupada porque no hay trabajo ni manera de llevar ingresos a sus hogares. “Si antes había pocas oportunidades para ellos, ahora disminuyeron mucho, por eso estamos juntando todo aquello que puedan necesitar entre los vecinos solidarios que hacen diferentes aportes”, manifestó la mujer.

La pandemia por Covid-19, según Silvia, no es para las familias del barrio un tema central. “En realidad ellos están más preocupados por llevar comida a sus casas que por el coronavirus en sí”, admitió.

Las donaciones en alimentos para Solecitos Naranjas se obtienen de cuatro panaderías y un mercado del barrio, que colaboran desinteresadamente, semana a semana.

“También recibimos aportes del pueblo en general, como dice mi marido, “Juan Pueblo”. Del municipio no nos llega ninguna ayuda, excepto la colaboración de un concejal, quien aportó con juguetes para los niños y niñas, para el Día del niño”, relató Silvia.

La mesa de los pibes

También en barrio Colinas, otra mujer solidaria, Soledad Ramos, que en plena pandemia abrió el merendero La mesa de los pibes, (calle Cuchilla Nevada Esq Yerba Buena), y trabajaba en principios con una fundación y el Centro vecinal Barrio Colinas, informó a Carlos Paz Vivo! que ahora se encuentra trabajando sola en esta iniciativa.

“Estoy trabajando de manera independiente en el merendero. Paré un mes porque había muchos casos de coronavirus, pero la semana pasada arranqué nuevamente. También hago un ropero comunitario para los que necesitan ropa y calzados, lo que se pueda juntar”, dijo Soledad.

Actualmente, de lunes a viernes, la joven le da la merienda a alrededor de 45 chicos y chicas del barrio. “Si bien les doy la copa de leche a los niños, las ollas de alimentos ya no las hacemos más. Algunas personas pudieron volver a trabajar o encontraron algo de solución, no pasaba eso al principio de la pandemia”, explicó.

Por último, Soledad comentó que su foco de atención está puesto en brindar contención a los chicos. “Limpiamos la plaza, la mantenemos, hicimos una merienda especial para el Día del niño donde le dimos la copa de leche a 150 chicos. Seguimos trabajando pero con la ayuda de gente de acá, que colabora en las meriendas o donando alimentos”, destacó.

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Publicado por Carlos Paz Vivo en Lunes, 29 de junio de 2020