Un insólito episodio tuvo como víctima a un menor de 13 años este viernes a la mañana, en la puerta de los consultorios del Sanatorio Privado Punilla. Un hombre simuló ser familiar de un enfermo y, al ver que el adolescente pasaba caminando por la puerta de los consultorios, sobre calle Solís, le pidió prestado el teléfono para realizar una llamada, se metió al sanatorio y no apareció más.

En dialogo con Carlos Paz Vivo!, la madre del niño, señaló: “Mi hijo actuó de buena fe y le prestó el teléfono porque dijo que el hombre, de unos 50 años, estaba como afligido porque le dijo que necesitaba hacer una llamada y que su teléfono se había quedado sin batería”.

La mujer indicó que el menor le dio el celular y que el hombre inició la llamada y se metió adentro de la sala de espera. Mientras tanto, la víctima aguardaba afuera; pero al pasar unos minutos decidió entrar para recuperar su celular; pero el hombre ya no estaba, había desaparecido.

Al contarle a su mamá, volvieron juntos al centro médico; pero la respuesta de los recepcionistas fue desfavorable.

“Me dijeron que no habían visto nada y, cuando le pedí que por favor se fijen en las cámaras de seguridad, respondieron que no andan y que tampoco hay personal de seguridad. Tampoco se hacen cargo de los robos adentro de la sala”, apuntó la mujer.

Y cerró: “Indigna mucho y preocupa que ahí adentro pueda pasar cualquiera. Esta persona entró por Solís, se movió como si nada por ahí adentro y seguramente salió por la guardia; y nadie se enteró de nada. Según me contaron, no es la primera vez que sucede algo así, y queremos que se sepa para que nadie más sea víctima”.