El femicida de Ivana Módica, el militar Javier Carlos Galván, comprendía y fue consciente de la criminalidad de sus actos la noche que mató a la mujer, en la casa en la que convivían en La Falda.
Así lo determinó la pericia psicológica de la que se conocieron apenas unos detalles esta semana.
Galván está imputado de homicidio calificado por el vínculo y por violencia de género (femicidio).
La fiscal Paula Kelm, que se hizo cargo del caso la semana pasada tras volver de su receso estival, le dictará la prisión preventiva la semana que viene y allí se conocerán los datos de la pericia psiquiátrica que también se le practicó al piloto de avión de la Fuerza Aérea.
Galván mató a Ivana Módica en la noche del jueves 11 de febrero y escondió el cuerpo a la vera del Camino del Cuadrado. Tardó ocho días en reconocer lo que había hecho y en indicar adónde había escondido el cuerpo.
