La municipalidad de San Antonio relanzó una campaña que empezó en septiembre del año pasado para que los vecinos donen eco-ladrillos.

El biólogo Diego Giménez, responsable del área de Ambiente de la localidad vecina, explicó que se trata de darle un destino a los plásticos de un solo uso, como los films que envuelven alimentos, e introducirlos en una botella de cualquier tamaño hasta que queden bien compactos.

De este modo, estas botellas conforman ladrillos que se utilizan de relleno, ahorrando material, energía que impacta en la huella de carbono y contribuyendo positivamente a no generar residuos para el enterramiento sanitario en la planta de tratamiento.

El objetivo de estos eco-ladrillos, en este caso, es construir una ciclovía en la costanera de San antonio hasta el límite con Mayu Sumaj, mediante el reciclaje y el cuidado del medioambiente.

Cualquier vecino de cualquier localidad puede colaborar con este proyecto fabricando sus eco-botellas y llevándolas a la mesa de entrada del municipio de San Antonio.