Tras la polémica suscitada en la ciudad de Villa Carlos Paz con el primer proyecto enviado por el intendente Esteban Avilés al cuerpo legislativo que suspende por un año las edificaciones en altura, siguen las repercusiones luego de que la norma fuera aprobada en una sesión extraordinaria.
El concejal del bloque de Carlos Paz Inteligente, Carlos Quaranta, presentó un pedido de informes que se fundamenta en la necesidad de dimensionar el impacto que tienen las construcciones de viviendas en el entramado urbanístico de la ciudad.
“Para dimensionar el impacto que está teniendo la construcción de edificios en nuestra ciudad primero debemos saber exactamente de cuántos edificios estamos hablando”, señaló Quaranta y apuntó: “Ante la decisión tomada, entendemos que el Intendente debe contar con esta información y debe ser puesta a disposición para poder planificar con certezas y no solo con expresiones”.
Consultado por el contenido del proyecto presentado, Quaranta indicó que “estamos pidiendo que se brinde la información acerca de cuántos proyectos hay aprobados y en proceso de ejecución, es decir, qué edificios se están construyendo en este momento; también qué edificios tienen aprobado el proyecto, pero aún no han iniciado la obra; y aquellos que iniciaron expedientes y aún no cuentan con aprobación del Municipio y, finalmente, cuántos edificios se han construido en los últimos 10 años”.
Por otro lado, sostuvo que con la información en la mano, se podrá “empezar a tener un mapa real del impacto que las decisiones que ha tomado la gestión de Carlos Paz Unido desde 2011 han tenido sobre nuestra ciudad, y si ha habido una planificación adecuada, y como proyectar el futuro.”
Y continuó: “Estamos plenamente de acuerdo con la necesidad de una planificación adecuada, ahora también decimos que las ciudades actuales no pueden ir detrás de los problemas, una verdadera planificación de la ciudad, sobre todo con 12 años de gobierno, y con el ejido de la ciudad ampliado y triplicado en 2018, no debería encontrarnos en esta situación de tener que frenar las obras para una revisión de los parámetros de desarrollo de la ciudad, lo que debió hacerse hace años a través del CPUA y con la participación de los diversos actores locales”.
