El cordobés se comunicó con Sebastian Galleguillo, el joven bonaerense que fue noticia por continuar su entrenamiento olímpico en la pileta construida por su familia con postes, palos y chapas.

Desde el cierre de la pileta del Polideportivo La Patriada, en Florencio Varela, Sebastian Galleguillo, de 18 años y con hipoacusia, estuvo imposibilitado de continuar con su práctica habitual la cual lo ubica como uno de los proyectos (por no decir realidad) más importantes de la natación paralímpica a nivel nacional.

Tras ser noticia en medios argentinos e internacionales, el joven fue contactado por el por José Meolans para brindarle su apoyo en este momento y empujarlo a conseguir los objetivos pospuestos por la pandemia.

“Me llamó y cuando me dijo que era él, no lo podía creer. Hablamos bastante y me dijo que no renuncie a los proyectos que tenía pensado antes del 20 de marzo, que le meta con todo”, contó Galleguillo y agregó: “voy a recordar este llamado cada vez que me meta en la pile a nadar. Me hizo muy bien”.

Foto: Franco Fafasuli

Cabe recordar que Sebastian entrena en la pileta “casera” que le construyó su familia con ayuda de vecinos, la cual es un rectángulo de chapas sostenida por postes y palos, cubierta por dentro con nylon resistente. Para mantener el agua caliente en esta época invernal, su familia también creo un calentador casero el cual mantienen con palos recolectados por la zona, lindante al comienzo de la parte rural fuera del conurbano.

“Con la natación soy uno, soy completamente yo: ahí no dependo de la audición, ahí soy yo en el agua y necesito mi cuerpo nada más para entrenar”, dijo Galleguillo.