Dos sospechosos que escapaban de la Policía a bordo de una moto robada embistieron y mataron a una joven embarazada que se trasladaba en un rodado similar junto a su pareja, en la localidad bonaerense de Castelar, informaron este lunes fuentes policiales y judiciales.

Más tarde, uno de los dos detenidos, quien no había sido hospitalizado, murió en una comisaría, por lo que se inició una segunda causa judicial para investigar si su muerte está vinculada al choque o le sucedió algo en la sede policial.

Los padres de la joven fallecida, identificada como Milagros Silva (21), pidieron ante la prensa que se investiguen las circunstancias del hecho, ya que según les contaron los vecinos, fue el patrullero sin sirena ni balizas el que embistió a la moto de los delincuentes y eso produjo el choque con la moto en la que iba su hija.

“Mi hija salió diez minutos a comprar y no volvió más”, dijo entre lágrimas Alejandra, madre de Silva, quien estaba embarazada de tres meses y había salido en la moto de su padre junto a su pareja a comprar queso y gaseosa para la cena.

El hecho ocurrió el domingo a la noche, cerca de las 21, y todo se inició cuando un repartidor de comidas de la aplicación Rappi observó sobre la avenida Yrigoyen, a la altura del cuartel de bomberos de Morón, que tres perseguían a una cuarta y que uno de los sospechosos estaba armado, secuencia de la que los investigadores ya poseen un video.

Al cruzarse con un patrullero, el repartidor denunció el hecho ante los policías y brindó una descripción de los sospechosos, por lo que se irradió un alerta en la zona y fueron los efectivos de otro móvil policial, de la comisaría 1ra. de Ituzaingó, quienes visualizaron a las tres motos en el cruce de Rivadavia y Pérez Quintana, de esa localidad de oeste del conurbano,

Al ver a los policías, los ocupantes de las motos comenzaron a huir, por lo que el patrullero inició la persecución de una de las motos, color blanca, que tenía pedido de secuestro activo, ya que había sido robada en zona norte, detallaron las fuentes.

Siempre según las fuentes, la moto estaba tripulada por dos jóvenes, quienes se dirigieron hacia la zona de Castelar, donde mientras eran perseguidos embistieron en el cruce de las calles Pardo y Palmero a una motocicleta tipo 110 también blanca, en la que viajaba Silva con su pareja, Ariel Boracchia (23).

A raíz del impacto, la joven embarazada, quien aparentemente no llevaba colocado casco, murió en el acto, mientras que su pareja sufrió heridas, al igual que uno de los tripulantes de la moto perseguida.

Los dos detenidos en el lugar fueron identificados por la policía como Leonardo Díaz (27) y Martín Prada (19).

Tras ser asistidos por personal médico, Prada -a quien le secuestraron en su poder un revólver calibre .22-, fue trasladado herido y con custodia a un hospital de la zona, pero Díaz no fue hospitalizado y fue enviado detenido a los calabozos del Destacamento Castelar Sur.

En esa sede policial, más tarde, sufrió una descompensación y falleció en su lugar de detención, lo que originó otra investigación.

El caso en el que falleció la joven embarazada está a cargo del fiscal Oscar Marcos, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 de Morón, quien estuvo en el lugar del hecho hasta la madrugada dando directivas.

“Aún no está claro cómo o quién provocó el choque, ni si el patrullero venía o no con sirena y balizas. Se trata de una zona oscura donde no hay un domo que haya captado el momento del hecho, pero se ordenó un relevamiento de cámaras cercanas para internar obtener algún video que ayude a dilucidarlo”, dijo  un vocero judicial.

El fiscal esperaba también que se realice la autopsia de Silva para poder entregarle el cuerpo a la familia.

Por el momento no hay policías imputados, y el único detenido será indagado por “encubrimiento” (la moto de los delincuentes era robada), “portación ilegal de arma de uso civil” (por el revólver secuestrado) y “homicidio” que podría ser “con dolo eventual”, por la muerte de Milagros.a

En tanto, la muerte del detenido Díaz en la comisaría es investigada por otra fiscal, Marisa Monti, de la UFI 5 de Morón, quien apartó a la policía bonaerense de la pesquisa y puso a trabajar a la Gendarmería Nacional, al tiempo que aguardaba el resultado de la autopsia.

Monti intentará determinar si el deceso estuvo vinculado a alguna lesión del choque que no vio el médico que acudió al lugar o si algo le sucedió al detenido más tarde en la dependencia policial.