Que el lago San Roque está contaminado y con una alta presencia de cianobacterias no es novedad.
Lo que sí es novedad es el llamado de atención del Ministerio de Salud de la Nación que hace unos días emitió un comunicado alertando sobre la presencia de las mismas en las distintas aguas del embalse y ríos de la cuenca, como el San Antonio, que en verano usan para refrescarse gran cantidad de turistas y vecinos.
El investigador local que mas luchó por dar a conocer esta problemática sobre nuestro lago a nivel nacional es el político y médico sanitarista Emilio Iosa, quien presentó hace un año un nuevo proyecto de investigación (del cual es director) al Observatorio de Salud y Ministerio de la Nación.
Una de las líneas claves de su trabajo advierte sobre la presencia de las cianobacterias y sus toxinas en el vapor de agua del embudo del dique, la famosa cola de novia, que tanta gente va a disfrutar como un espectáculo único, pero sin protección alguna.
Las cianobacterias (presentes en algas verdeazuladas) son un grupo de bacterias capaces de hacer fotosíntesis y producir toxinas peligrosas que pueden provocar una amplia variedad de infecciones gastrointestinales, respiratorias, neurológicas, de la piel, de los oídos y de los ojos. Los síntomas más comunes son la diarrea, las erupciones cutáneas, dolor de oído, tos e irritación ocular.
En conversación con Carlos Paz Vivo!, Iosa contó sobre su investigación en curso: “La exposición a las cianobacterias que preocupa sobre todo ahora en verano, y que perjudica la salud de los turistas que llegan y de los vecinos, es por la inhalación de los aerosoles que desprenden las aguas del San Roque en la cola de novia”.
Además, esa misma exposición puede darse por la ingesta del agua contaminada de lago y ríos y hasta existe posibilidad de infección si la persona que ingresa a las aguas presenta algún corte o tiene una herida abierta.
El investigador destacó que “ya venía tomando hace tiempo muestras de agua con la presencia de cianobacterias y microcristinas (producidas por las floraciones de cianobacterias tóxicas de aguas) cuando detecté en una primera investigación Sars-cov 2 en las aguas recreativas del lago San Roque, y oportunamente alertamos a las autoridades para que se pueda prevenir a la población y cuidar la salud”.
Según detalló Iosa, en su investigación trabajan otros expertos de la Universidad Nacional de Córdoba y del Instituto de Virología Dr. José María Vanella. “Convoqué para que trabaje conmigo al Lic. Lic. Exequiel Di Tofino –físico químico y profesor- entre otros, a él especialmente para realizar el análisis enzimático de la toxina, dado que es un especialista en la materia”.
Prevenir en verano y todo el año
Respecto a las formas de prevención por la aerosolización de las toxinas de las cianobacterias (cuando estas se mezclan con el aire y se transmiten en forma de gotas muy diminutas) por ejemplo en el embudo del San Roque, el médico sostuvo: “Es clave hacer la prevención necesaria y simple en estos casos, a través de la información y educación, como ya empezó a hacer el ministerio de Salud de la Nación”.
La forma de prevención según Iosa es sencilla: “Usar barbijo en el lugar para no respirar las toxinas y no acercarse cuando hay afloramiento de cianobacterias tóxicas, presencia de las famosas algas verdeazualadas)”.
Asimismo, hizo hincapié en que “todavía el Ministerio de Salud de la provincia de Córdoba y el municipio de Villa Carlos Paz no se han expresado oficialmente sobre este tema, pero es necesario difundir y tomar medidas para no perjudicar la salud de la población y de los turistas que llegan a Córdoba”.
En tal sentido, Iosa recordó la denuncia penal por negligencia efectuada a los funcionarios provinciales y municipales, “por no alertar sobre los riesgos que la presencia de toxinas, virus y bacterias en las aguas recreativas del lago San Roque y ríos de la cuenca”.
La contaminación en el río
Asimismo, el médico e investigador habló de los líquidos cloacales que se vierten en el lago y en el río San Antonio, entre otros. “Ya habíamos hablado también en su momento de la importante cantidad de líquidos cloacales mal tratados o sin tratar que se vierten a la cuenca del lago, en toda su extensión.”, recordó.
Y advirtió: “La contaminación del San Roque y ríos de la cuenca en algunos sectores es muy elevada en ese sentido, tanto que no se podría nadar en algunos. Hace unos días fui a tomar unas muestras de agua al sector de la Olla, río San Antonio, cerca de Parque Estancia La Quinta, donde hay un arroyo de cloacas, y los turistas se sorprendieron al verme trabajar, preguntaron y por supuesto, les brindé la información como corresponde. No podemos seguir haciendo oídos sordos a estas cuestiones fundamentales para la salud, como si no existieran”.
Uso recreativo de las aguas
El investigador pidió tener presente que el uso recreativo del lago San Roque, como así también de otros lagos y ríos del país, está regulado en la Resolución nacional 125/2016, donde figuran las “Directrices sanitarias para el uso seguro de aguas recreativas”.
Al respecto, manifestó: “En ese documento está claro cuándo se pueden usar las aguas recreativas, de qué cómo y cómo prevenir, de acuerdo a los distintos niveles de contaminación, solo que no se respeta la reglamentación”.
Por último, Iosa comentó que “uno de los objetivos de su trabajo de investigación tiene que ver poder modificar o ampliar esas directrices para dejar en claro cómo proceder en la convocatoria masiva de personas que se exponen a la aerosolización con presencia de virus y bacterias, y también explicar qué pasa cuando esto toma contacto con los alimentos como pastelitos, por ejemplo”.
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El Ministerio de Salud de la Nación emitió una advertencia por las cianobacterias en el San Roque
