Silvino Báez, el padre de Fernando, el joven asesinado en Villa Gesell, dijo hoy que sabía que “podía pasar” que la Justicia dejase en libertad a alguno de los acusados del crimen de su hijo aunque aseguró que cree que “los diez” rugbiers detenidos inicialmente son “culpables” y que “la Justicia está para demostrarlo”.

“Sabíamos que podía pasar, todos somos inocentes hasta que se demuestro lo contrario”, sostuvo esta tarde a la prensa el hombre luego de conocer que por orden del juez de Garantías David Mancinelli los imputados Alejo Milanesi y Juan Pedro Guarino dejaron el penal de Dolores.

El hombre aseguró que Graciela Sosa, su esposa y madre del joven, “lo tomó muy mal” pero aclaró que no quieren “ningún inocente preso”.

“Creo en la Justicia porque no tenemos otra alternativa. Para mi los diez son culpables, asesinos crueles y traicioneros, pero la Justicia está para demostrarlo porque si yo pudiera hacer justicia por mano propia sería una jungla”, indicó.

Por último, Báez contó que el Papa Francisco le dejó un mensaje en su celular en el que lo dijo que “lo llamaba” y que les envió “un saludo fuerte para Graciela y Silvino”.