Está todos los fines de semana en la costanera oeste del lago San Roque. Allí, Susana es una de las vendedoras que ofrece los productos que elabora en su casa y que se inspiraron en Tequila, su perrita a la que quiere como una hija.

Susana vendía macetas y cuando se dio cuenta de que tenía que hacerle su propia ropa a Tequila vio la posibilidad de un negocio. Y comenzó a elaborar pecheras, camperas, y hasta smokings para perros y gatos. Pero lo que más se llevan vecinos y turistas son los pasamontañas que tienen distintos modelos y formas locas.

“Es todo prueba y error con Tequila, que es mi modelo. Estaba en la feria y vendía macetas y plantas. Me regalaron a la niña y era tan chiquita que tuve que empezarle a hacer la ropa”, aseguró.

“Tenemos buzos, polar, camperas igual que las nuestras, de todos los tamaños. Tenemos vestiditos con tutú, smokings”; contó Susana.

Hasta capa de lluvia tiene el stand. “El furor de la gente son los gorritos que es lo que más se lleva”, remarcó.

Seres sintientes

Para  Susana hay un cambio de mentalidad en la gente y eso se trasluce en una nueva manera de tratar y ver a los animales.

“Los animales son seres sintientes y los trata como hijos. Al menos yo a Tekila la trató así y a ella la visto con todo tipo de ropa y se siente desnuda si no tiene algo puesto”, destacó la mujer.

Y continuó: “Gracias a Dios me va super bien y siempre estamos tratando de innovar y hacer algo nuevo.”