Martín Speroni y Mariela Flores, los papás de Joaquín, el adolescente de 14 años que apareció muerto el domingo pasado en una casona abandonada a la vuelta de la escuela a la que concurría, emitieron un duro comunicado en el que criticaron el accionar policial, judicial y de los docentes del IPEM Malvinas Argentinas.

El menor desapareció el jueves 29 de junio y fue encontrado el domingo 1 de julio por una de sus primas en una casa abandonada sobre calle Sarmiento y Daireaux, en Laboulaye.

Su mejor amigo, L., confesó el crimen y eso generó una fuerte conmoción en la comunidad y en todo el país. El menor, también de 14 años, fue trasladado al Complejo Esperanza dado que es inimputable.

El comunicado señala:  “A una semana de que nuestro hijo Joaquín falta de nuestra casa seguimos sin respuestas y dejamos bien en claro que desde el primer momento que denunciamos su desaparición ningún organismo público, como ninguna institución de nuestra ciudad, se acercó a nuestra puerta a brindar apoyo ni a colaborar con su búsqueda”.

Y sigue: “Estamos totalmente disconformes con la investigación llevada a cabo por el comisario (Enrique) Carreras y por el fiscal Walter Guzmán. Hicieron rastrillajes en las afueras de la ciudad y fue la propia familia que al tercer día de la búsqueda encuentra a Joaquín sin vida a 100 metros de su escuela, donde desapareció”.

Además, señala: “No tuvieron empatía ante nuestra desesperación por hallar con vida a Joaquín, han mostrado su inoperancia y que no están preparados para desempeñarse en el cargo que le han conferido”.

Por otro lado, le pidieron a los vecinos que aporten datos: “Les pedimos a los vecinos próximos al lugar del hecho que si tienen cámaras de seguridad las aporten a la Justicia y a los ciudadanos que tengan algún dato que sea de interés para la causa que lo denuncien a los teléfonos 3385-597392 y 3385-408409”.

Asimismo, aseguraron que lucharán por la “Ley Joaquín”, para que se baje la edad de la imputabilidad en este tipo de hechos aberrantes.