En apenas 30 minutos, la policía logró detener a dos sospechosos casi en el acto de que se llevaran a cabo distintos ilícitos en pleno centro de la ciudad.

El primero de los hechos se dio en inmediaciones de la iglesia del centro a las 22:00hs. tras la denuncia del empleado de un comercio, menor de edad, quien denunció que le habían robado el celular.

Cuando la policía logró interceptar al sospechoso, oriundo de Santa Fe de unos 20 años de edad, a pocas cuadras de hecho con el celular del damnificado entre sus pertenencias.

En ese momento, se acercó un menor de 15 años, quien aseguró que ese mismo sujeto en otro hecho, minutos antes le había sustraído 600 pesos en efectivo. Los cuáles también fueron hallados entre las prendas del sospechoso, por lo que fue detenido como sospechoso de ambas circunstancias delictivas.

Robo a un kiosco y fue detenido

Por otra parte, un hombre de 27 años fue detenido luego de darse a la fuga con mercadería, de un kiosco ubicado sobre la calle 9 de Julio a pocas cuadras del hecho anterior y tan sólo unos minutos después.

El hombre ingresó al kiosco, comenzó a cargar mercadería y en determinado momento salió corriendo. Siendo interceptado por la policía a pocas cuadra.