Yao Cabrera era un viejo conocido de Carlos Paz o, mejor, conocía desde hace tiempo la ciudad antes de decidir quedarse a vivir aquí en el medio de la época de la pandemia.

La primera vez que llegó lo hizo en 2018 con un grupo de youtubers uruguayos como él (Viral team) que había pasado a la fama por mostrase en casas lujosas, con autos de alta gama y todos los elementos para componer una trama de ricos y famosos. Una larga cola de chicos de entre 10 y 15 años esperaba su momento para un llevarse una foto, un autógrafo, una remera del grupo, a un costo elevado para la época.

En 2021, buscó una casa lujosa en La Cuesta e instaló allí su Mansión Wifi donde no pararon los escándalos.

Fueron años de pandemia y así y todo el youtuber se las ingenió para montar escándalos y provocar más vistas en Youtube, la red social donde pasaba todo en esa época antes de que crecieran TikToK e Instagram.

En 2020 año, la Justicia allanó su casa porque se lo acusaba de haber organizado una fiesta clandestina, en momentos en que eso estaba absolutamente prohibido.

Antes, en Buenos Aires, había fingido su propia muerte y estuvo involucrado en escándalos sexuales.

En 2021 se allanó la propiedad que alquilaba porque había una denuncia por una usurpación.

Luego, se preparó para una pelea con el Chino Maidana que nunca se concretó.

En 2023,

 

 
En 2022, se denunció que cayó de un tercer piso de la casa que alquilaba en Carlos Paz y que fue internado en terapia intensiva en un nosocomio de Córdoba. Nunca se conocieron mayores detalles de esa internación.

En noviembre de 2024, el influencer Yao Cabrera y el ex Gran Hermano Martín Ku protagonizaron un bochornoso episodio en esta ciudad. Lo que se cree que pasó es que Cabrera persiguió a Ku en plena ruta, lo increpó por los rumores de un romance con Gisela Gordillo, madre de Tomás Holder, y terminaron a golpes de puño.

“Es típico venir a Carlos Paz y cruzarte con el fracasado de Yao Cabrera”, dijo Ku en aquel momento en una publicación.

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Ahora, Cabrera fue detenido en Córdoba por la Policía Federal al quedar firme la sentencia de cuatro años y medio de prisión por una causa en la que una exempleada lo denunció por reducción a la servidumbre.