La contaminación del lago San Roque es una problemática que, desde hace varios, preocupa a las autoridades y vecinos; más teniendo en cuenta que no sólo se trata del recurso natural que promueve el turismo en Villa Carlos Paz, sino fundamentalmente por ser una de las fuentes hídricas más importantes de Punilla y la capital provincial.
En este sentido, las autoridades sanitarias de la Municipalidad junto a otras organizaciones como en Instituto Nacional del Agua, desde hace mucho tiempo vienen implementando una serie de acciones con el objetivo de mitigar el problema y estudiar la forma para ir resolviéndolo, en la medida de lo posible.
Para eso, de manera periódica se realizan monitoreos por las zonas más críticas, lugares donde se llevan a cabo trabajos para eliminar las cianobacterias.
Este viernes a la mañana se llevó a cabo uno de los controles y Carlos Paz Vivo! navegó junto a la directora de Ambiente Ejido y Desarrollo Sustentable, Mónica Martínez, quien brindó detalles sobre los trabajos que se encaran.
La funcionaria contó cómo se actúan en los puntos más críticos, que es una bahía próxima al centro de la ciudad, la bahía cercana al conocido puente de las piedras en Costa Azul Sur y en una zona próxima a El Diquesito.
Según explicó la funcionaria, en estos lugares una de las acciones fue colocar plantas acuáticas como los camalotes que, de una manera natural, ayudan al proceso de absorción del fósforo y nitrógeno generados por la gran presencia de materia orgánica en el lago.
Esto permite que, de alguna manera, estas plantas compitan con las cianobacterias y actúen antes que se liberen las toxinas propias del proceso de descomposición.
