Sandra Sánchez, en una de las marchas para pedir justicia por Hernán.

La familia de Hernán Sánchez, el fotógrafo encontrado sin vida en el Cerro de la Cruz el 13 de marzo de 2015, elevó nuevamente su pedido de justicia en un caso con muchos puntos oscuros y en el que la hipótesis del suicidio fue rechazada de plano por sus allegados. La familia y los amigos del fotógrafo lo buscaban desde el 19 de diciembre de 2014.

El cuerpo de Hernán fue encontrado por casualidad en la mañana de ese fatídico 13 de marzo. A esa hora, en el Cerro de la Cruz un grupo grande de personas buscaban desesperadamente a Andrea Castana que había desaparecido dos días antes mientras bajaba por el sendero hacia la base. Un escuadrón del Cuerpo Especial de Policía halló su cuerpo en un cañadón. El fiscal Ricardo Mazzuchi le confirmó a los periodistas que se encontraban en el lugar que el cuerpo hallado era el del fotógrafo. A metros estaban sus padres y sus hermanas.

“Es un día bastante difícil. Desde el 19 de diciembre al 13 de marzo todos los días son difíciles porque es el tiempo que atravesamos desde que desapareció hasta que encontraron el cuerpo”, dice Sandra Sánchez, una de sus hermanas y quien alzó la voz para pedir el esclarecimiento del crimen.

La causa está en manos del Tribunal Superior de Justicia luego de  que el fiscal Mazzuchi pidiera su archivo bajo la carátula de suicidio.

“Hasta ahora no se sabe nada, apelamos lo que quería resolver Mazzuchi que era cerrar el caso como suicidio y hemos insistido en el cambio de carátula pero aún no hemos tenido una respuesta por parte de la Justicia”, dice.

Para Sandra, el cambio de carátula es fundamental ya que sólo de esa manera se podrá iniciar una investigación sobre lo que consideran fue un crimen.

“Exigimos justicia pero no se viene haciendo nada”, señala la mujer en tono de queja.

Evidencias

Sandra asegura que la primera autopsia reveló elementos claros de que a su hermano lo mataron. “La autopsia que se hizo dice que Hernán fue torturado, hay signos que tiene en los omóplatos de que su cuerpo fue arrastrado en vida, sufrió golpes en vida, torturas. La rama donde estaban atados los cordones estaba a la altura de la estatura que tenía Hernán. Mi padre se paró abajo de la rama y es imposible que se haya suicidado”, asevera la mujer.

Además, la mujer insiste en que en esa primera autopsia se detectó una herida cortante en el abdomen que sería la que le causó la muerte. “Eso está en la autopsia y lo tenemos”, sostiene y agrega: “Y tenemos el informe de la otra autopsia que se había hecho y no participaron ni el perito de parte ni el perito judicial y en esa se desmiente todo lo que plantea la segunda autopsia”.

“A Hernán lo mataron; quiénes, no sabemos”, afirma Sandra Sánchez que asegura que los asesinos hicieron todo bajo reglas de los profesionales del crimen. “Hay hipótesis que no se investigaron. La Justicia ni siquiera quiere cambio de carátula y para poder empezar a investigar necesitamos que se cambie la carátula”.