El menos, de 10 años de edad, le sacó plata de los ahorros a sus padres sin que ellos supieran. El hecho salió a la luz cuando una maestra del colegio vio una fila de chicos con billetes en el kiosco y avisó a las autoridades.
La extraña situación se dio en una escuela primaria de la localidad de Caleta Olivia. El alumno de cuarto grado concurrió al establecimiento con una suma cercana a los $100 mil y los repartió entre sus compañeros.
En un principio, las autoridades del colegio pensaron que podría tratarse de un caso de bullying, ya que es frecuente que los agresores pidan dinero a las victimas. A raíz de esta sospecha fue que desde la escuela tomaron cartas en el asunto.
Según informó La Vanguardia, los alumnos manipulaban una gran cantidad de billetes en el kiosco, llegando a algunos a realizar compras de hasta 3 mil pesos.
Al enterarse, la madre del chico fue al colegio. La mujer dijo que no sabía que su hijo le había sacado la plata y no pudo precisar si ya lo había hecho anteriormente o si esta “exigencia” de dinero era frecuente. Luego del momento de preocupación, los padres pudieron recuperar gran parte del dinero sustraído.