El médico pediatra Ariel Edgardo Gómez escribió una carta abierta al gobernador Juan Schiaretti solicitando más insumos y personal para el hospital Domingo Funes, transformado hoy en el centro regional de atención de la pandemia de coronavirus.

“Nuestra preocupación subyace en la incertidumbre que genera la proyección de los porcentajes, tanto de infectados, pacientes que necesiten internación y aquellos que requieran cuidados especiales o asistencia respiratoria mecánica (ARM)”, expresa Gómez en la carta.

Y agrega:”Al 31 de marzo de 2020, en el Hospital Domingo Funes, el servicio de Clínica Médica tenía todas sus salas ocupadas (16 pacientes de los cuales 7 son sospechosos de COVID 19 Y 1 CONFIRMADO), solo dos enfermeras para todos los pacientes. El servicio de terapia intensiva solo cuenta con dos enfermeras por turno, 11 camas y 9 respiradores. El domingo 29 de marzo falleció la primera paciente con COVID-19 positivo”.

En otro orden, señala: “Hay que resaltar también que el personal ya era escaso antes de la pandemia, muchos en condición laboral inestable, monotributistas, sobrecargados y que el tiempo para capacitar y entrenar profesionales en este tipo de acciones se agota, ya que es inminente el aumento de consultas y la activación de protocolos va en franca subida”.

Y agrega: “Para ello los trabajadores de salud deben contar también con los elementos necesarios de protección personal, que según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, deben ser llevadas a cabo por el personal de salud para la asistencia de casos sospechosos y casos confirmados de COVID-19, y que cada trabajador debe disponer para el correcto resguardo de su integridad”.

Demandas

Entre las demandas que planteó el pediatra, que además es secretario adjunto de la CTA Autónoma de Córdoba, solicitó:

1- Protección de los Trabajadores de la Salud: La experiencia de enfermedad y muerte entre los trabajadores de la salud de Italia, España y EEUU está vinculada a la insuficiencia de Equipos de Protección Personal.

2- El COVID-19 es una enfermedad profesional por lo tanto exigimos que sea reconocido como tal por parte de las ART y de los autoseguros provinciales.

3- Participación de los profesionales de la Salud en los comités de crisis.

4- Reconocimiento al esfuerzo del personal de salud incluidos los administrativos de la ley 7233. Pase a planta a todos los trabajadores precarizados y recomposición salarial de 15.000 pesos al básico. Un médico especialista de 17 años de antigüedad cobra un básico de 29.000 pesos. Y que ningún trabajador este por debajo de la canasta básica profesional que en el día de la fecha está rondando los 60.000 pesos.