Se trata de Juan Manuel González, de 14 años. Sufrió traumatismo de cráneo y fue sometido a dos cirugías en el Hospital de Niños donde está internado. Su familia acusa a un trabajador de Seguridad Urbana, que lo persiguió en automóvil, provocó la caída del menor y huyo sin brindarle asistencia.
Juan Manuel González (14), es hijo de Ayelen Ledesma y Carlos González, y viven en Villa Santa Cruz del Lago. Desde hace un mes, sus vidas y la de sus allegados, se transformaron en un calvario, tras el accidente que sufrió el menor.
Actualmente Juan se encuentra internado en el Hospital de Niños de la ciudad de Córdoba. Enfrentó dos cirugías en la cabeza y según contó su madre, Ayelen, tuvo un severo traumatismo que lo dejó en grave estado.
Por el golpe, la familia culpa a un trabajador de Seguridad Urbana del municipio de Villa Santa Cruz del Lago, que lo detuvo para controlarlo ya que andaba en un cuadriciclo, lo dejó ir, pero luego lo terminó persiguiendo y cuando se cayó, huyó.
“El 29 de junio llegó de trabajar con su papá y me dijo que se iba un rato en el cuadriciclo”, dijo su mamá a Carlos Paz Vivo! y relató que pasó un buen tiempo y alguien se comunicó con ella por teléfono.
“Era el mecánico que me avisaba que Juan se había golpeado, que lo busquemos porque estaba vomitando sangre”.
La mamá contó que lo llevaron al hospital municipal Gumersindo Sayago. “Mientras lo trasladábamos en el auto, nos contaba que se sentía aturdido, pero estaba bien, le dolía el cuerpo y yo pensaba que era por el golpe y no era nada grave”.
En el trayecto, su hijo les señaló que un trabajador de Seguridad Urbana del municipio de la localidad donde viven “lo paró y no le creía la edad que tenía, que lo comenzó a seguir, el se asustó, aceleró y agarró una lomada y se cayó”.
El niño también le dijo a sus padres, que después de la caída logró llegar hasta la casa del mecánico por su propia cuenta en el cuadriciclo.
En el hospital de Carlos Paz lo atendieron de urgencia y le realizaron los estudios necesarios. “Luego de que ingresó a hacerse una tomografía, salió mi marido diciéndome que Juancito tenía que ser trasladado porque tenía un coagulo muy grande y un traumatismo de cráneo, lo que significó algo de terror. Nunca supe lo que es llevarlo a un Hospital más que hacerle una ficha médica, siempre fue sano”, relató.
A las poas horas, fue trasladado al Hospital de Niños de la ciudad de Córdoba y según indicó su mamá, después de una hora que llegaron, Juan comenzó a dormirse “y no lo pudieron despertar más”.
“Ingresó a una cirugía de urgencia tipo 3 de la madrugada. Estaba contenta porque mi marido me dijo que la operación había salido bien, pero la doctora me señaló que Juan estaba muy grave y que no sabían si iba a salir”, apuntó la mujer, quien describió que fue un shock escuchar semejante noticia.
También destacó que jamás se imagino que un vehículo tan chico, le podría provocar el estado de gravedad que tiene. “El cuadriciclo es muy chico, ni siquiera es para su tamaño, por ahí si fuera más grande, uno tiene noción del peligro que significa, pero nunca imagine que podría estar así por una caída, que se la provocó alguien y fue culpa de una persona”, agregó.
La historia detrás del accidente
Hasta ese entonces, la familia se había quedado con el relato que hizo su hijo mientras lo llevaban al nosocomio de Carlos Paz y que apenas pudo contar algo de lo que le sucedió. Pero detrás de la caída, había algo más que lo aportaron los testigos luego.
“Se comunicó unos días después una chica, que me dijo que tenía que contarme algo porque la estaban llamando vecinos, que fueron testigos del accidente”, señaló Ayelen.
Y siguió: “Me dijo que querían ayudarme y contarme; yo me sorprendí cuando me dijo del accidente. Y ahí me contó que Juan iba por la colectora de la ruta 38, a pocos metros de Peko’s, cuando un Seguridad Urbana le preguntó la edad y qué hacía con un cuadriciclo. El les dijo que nos llame, lo dejo ir pero comenzó a seguirlo con el auto”
La mujer señaló que fue en ese momento cuando su hijo se “asustó, cruzó la ruta, y agarró una calle donde fue que se cayó y lo dejó abandonado”.
“Me pregunto por qué lo tuvo que perseguir como si fuera un ladrón; le costó la vida a Juancito, hoy parece un niño con muerte cerebral. Un testigo le dijo al empleado municipal por qué no lo iba a socorrer, y le contestó que era menor”.
Subrayó que hasta el momento nadie se acercó a decirles nada y que están muy indignados y dolidos. “Es mucha impotencia ver a mi hijo postrado en la cama, con la mirada perdida”.
Qué paso después
Tras tomar conocimiento del hecho, la familia a través de una abogada envió el 12 de julio una carta documento al municipio de Villa Santa Cruz del Lago, informando sobre lo acontecido. Sin embargo, hasta este miércoles 28 no hubo respuesta.
Ayelen dijo que ya tienen identificado al trabajador municipal que habría sido quien provocó que Juan se cayera. “Tenemos el nombre de quien fue, y ya sabemos todo. El debe pensar que no hay testigos, pero vieron lo que hizo”.
La mujer sostuvo que no va a dejar “que esto quede así, un Seguridad Urbana está para cuidar a los vecinos y no para hacer este tipo de cosas”.
Estado de salud de Juan
El menor fue sometido a dos cirugías en la cabeza y “ahora esperamos que el cerebro vuelva a ir captando información”, indicó su mamá Ayelen Ledesma, quien pide a la población que recen por su hijo.
“Ahora hay que enseñarle a caminar, a hablar, la mitad del cuerpo no le funciona, cómo me puedo sentir como madre, es sumamente doloroso”, describió.
Estuvo en Terapia Intensiva, donde “lo entubaron dos veces y ahora estamos aislados porque fuimos contacto estrecho de una persona positivo de Covid. Dimos negativo, pero tenemos que esperar el alta. Nos tenemos que volver a hacer el test, para que nos pasen a la sala común”.
Juan deberá pasar por una rehabilitación. “Lo que me queda es rogar que mi niño vuelva a ser quien era. Los médicos me dan diagnósticos cortos, me dicen que tiene muchas posibilidades porque es chico”.
La mujer dijo que se encuentra muy angustiada por lo que le toca vivir junto a su hijo. Sufre ataques de pánicos, “estoy muy estresada, las 24 horas del día con él, cambiando sus pañales, hubo partes médicos que fueron terribles. Es como estar muerta en vida y sigo por él, me tengo que mantener en pie”.
“Todo esto implica gastos, no tenemos obra social, pero mi marido es trabajador y no nos hace faltar nada gracias a su esfuerzo”, detalló la madre, quien señaló que por ejemplo en el Hospital de Niños hay “escases de sabanas, y Juan orina mucho, por eso debemos tener tres o cuatro juegos diarios. Es una atención muy buena, pero falta esto. Gastamos 3 mil pesos en pañales por día”.
Ayelen no pierde la fe de que su hijo se va a recuperar, pero a la vez siente “mucha bronca con esta basura. Pido a la gente que rece por mi hijo, eso es lo que necesito”.
