El español venció en cinco sets a Daniil Medvedev (2-6, 6-7, 6-4, 6-4 y 7-5) y se consagró como el mejor del primer Grand Slam del año. Jugó 29 finales de estas características y ganó 21. ¡Histórico!

El Australia Open fue noticia desde el primer momento cuando Novak Djokovic, el tenista número uno del mundo, fue deportado tras no cumplir con las reglamentaciones vigentes en el territorio australiano.

De allí en adelante, fueron estos dos finalistas quienes animaron día a día el gran premio que inicia el año del mejor tenis mundial y por supuesto, la definición entre ambos no defraudó.

Fue el ruso quien se quedó con los dos primeros sets y eso despertó la mejor destreza de Rafael Nadal para adaptarse a lo que pedía el partido, ganar el tercer y cuarto set y en el definitivo adueñarse de un quiebre tempranero para festejar, después, su título número 21 en Grand Slam, máximo ganador de la historia, quebrando el triple empate con Federer y Djokovic.