La fórmula por la alianza Ética y Compromiso, Miriam Castelino y Fabiana Rocaspara, que aspiran a ocupar los roles de Defensora del Pueblo y Defensora adjunta, hablaron sobre los desafíos de fortalecer esta institución, la necesidad de promover la participación ciudadana en las elecciones que se desarrollará el 29 de junio y sus propuestas para revalorizar el rol de ese organismo.

¿Qué objetivos se están poniendo como dupla para la Defensoría del Pueblo?

MC: Lo primero que tenemos muy en claro es que la Defensoría cumple una función fundamental: ser contralor de la Administración Municipal. Tiene que velar por los derechos de los ciudadanos y garantizar que los servicios públicos sean eficaces y eficientes. Sabemos que hay mucho por hacer, pero también que se puede lograr.

La figura del defensor ha sido bastante desdibujada. En las últimas elecciones, la participación fue muy baja. ¿Cómo se puede revertir esa situación?

FR: Es un punto clave. Nuestra apuesta es justamente revalorizar una institución que en muchas partes del mundo funciona bien y garantiza derechos. Independientemente de a quién se vote, hay que recuperar la confianza en este espacio, que debería representar de forma efectiva a los ciudadanos.

Carlos Paz tiene la particularidad de elegir al defensor por voto directo. ¿Eso favorece o complica?

FR: Es complejo. Hay una contradicción: se supone que el defensor debe ser apolítico, pero para postularse necesitás el aval de un partido. Además, la elección no es obligatoria. Hay mucha desinformación entre los vecinos, y eso dificulta el acceso a este derecho.

¿Qué acciones consideran prioritarias si llegan a la Defensoría?

MC: Lo primero será conformar un equipo técnico que permita organizar y sistematizar los reclamos de los vecinos. Queremos monitorear servicios como el transporte público o el acceso al agua, evaluar su eficiencia y dar respuestas rápidas. Que en 24 o 48 horas el vecino sepa si su inquietud fue tomada, si se puede resolver o a qué área debe dirigirse.

FR: También queremos trabajar desde una lógica preventiva. Y poner énfasis en los sectores más vulnerables, que necesitan una atención especial: mujeres, disidencias, niñez y personas mayores. Son quienes más requieren una Defensoría activa y sensible.

¿Cómo ven que haya seis candidaturas? ¿No se dispersa demasiado el voto?

FR: A mí me parece positivo. Habla de participación, de interés por pensar propuestas y mejorar la institución. Sin participación ciudadana, no hay democracia. Y esta elección es una excelente oportunidad para involucrarse.

MC, en los primeros días de campaña aparecieron críticas por tu candidatura a concejal por Carlos Paz Unido hace dos años ¿Qué podés decir al respecto?

MC: Fue una alianza coyuntural con un espacio político en su momento, como lo es este frente también. Yo nunca asumí como concejal, no tomé juramento, por lo tanto no hay ningún cargo del cual renunciar. Esta es una propuesta nueva, desde otro lugar, con otro objetivo y con un equipo comprometido.

En su momento se habló que en la alianza Ética y Compromiso sería un frente que reuniría a la oposición y hubo diálogo con otros sectores como el Frente Cívico o el felpetismo ¿Por qué no prosperó?

FR: La idea era formar un frente amplio, pero no siempre se logran acuerdos. Nosotras venimos del territorio, de trabajar con la gente. No se trata de sumar por sumar, sino de coincidir en valores y objetivos. Tiene que haber una sintonía real en lo que se quiere hacer y cómo se quiere hacer.

Uno de los candidatos propone directamente cerrar la Defensoría. ¿Qué opinan?

FR: Respetamos todas las propuestas, pero no compartimos esa visión. Nosotros creemos en la necesidad de reformular la institución, sí, pero para fortalecerla. Tiene que haber más transparencia, mecanismos de evaluación, resultados visibles. Es lo que proponemos desde nuestro espacio: ética y compromiso reales.

MC: Que si llegamos a asumir, el trabajo será serio, con equipos técnicos, planificación y mucho compromiso. No se trata de promesas vacías, sino de organización y gestión.

FR: Y que la gente se acerque, que participe, que vote. Este tipo de elecciones son fundamentales para construir ciudadanía y defender derechos.