El día amaneció fresco y lluvioso. Si bien por la tarde salió el sol, la temperatura se mantuvo fresca y templada y los balnearios no fueron opción ya que los ríos llegaron con fuertes crecientes desde la mañana.

Por eso, las opciones variaron a paseos en hidropedales, en los catamaranes, excursiones, aerosilla y a la clásica vuelta por la Costanera o el Centro de la ciudad

Los bares y confiterías tuvieron una buena presencia de durante toda la jornada y la temperatura de la tarde fue ideal para recorrer los puntos clásicos de la ciudad.

Los comerciantes saben que estos días, los de clima más fresco y lluvia, son de mucho consumo y de buenos ingresos por eso a veces rezan para que el día no sea tan lindo como los  turistas desean.