Villa Carlos Paz se suma a las ciudades que prohíben el expendio de los sorbetes con su ordenanza Nº 6615. La implementación se desarrolla de manera progresiva y se prevén sanciones para quienes no cumplan, con el objetivo de avanzar de ese modo en la eliminación progresiva de los plásticos de un solo uso.

Un sorbete de plástico suele usarse unos 30 minutos, pero tarda cientos de años en descomponerse. Debido a su tamaño, los sorbetes no son reciclados y por lo tanto en el mejor de los casos terminan en un enterramiento sanitario. En el peor de los casos, los sorbetes llegan a cursos de agua, afectando al ambiente.

Desde el municipio, enfatizaron: “Esta política de minimización de residuos necesita de la colaboración del sector comercial para no ofrecer sorbetes y la conciencia de los ciudadanos para acostumbrarse a tomar bebidas sin sorbetes o llevando uno propio, reutilizable”.