En las últimas horas, un niño y una mujer mayor de edad sufrieron picaduras de alacranes en la ciudad de Córdoba. El menor permanece internado en el Hospital de Niños y la mujer está fuera de peligro.

Desde el programa de Zoonosis del Ministerio de Salud de la Provincia, brindan información y recomendaciones al respecto ya que en épocas de calor se deben extremar los cuidados para evitar las picaduras.

Alacranes o escorpiones

En la provincia de Córdoba, las especies de alacranes que se encuentran más frecuentemente son el Bothriurusbonariensis y el Tityustrivittatus. Si bien este último es el más peligroso, todos los alacranes son ponzoñosos, por eso es necesario consultar con un especialista ante cualquier picadura.

Los alacranes buscan ambientes húmedos y oscuros, por lo que en el interior del hogar se esconden dentro de zapatos, entre la ropa de vestir y la de cama, en el trapo de piso, o en grietas en las paredes. En el exterior, pueden ocultarse en sitios donde se acumula basura o escombros, debajo de piedras y troncos, entre otros.

Ante la presencia de un alacrán, es importante revisar toda la casa, y tratar de identificar el sitio por el cual pudo haber ingresado o en el que se está escondiendo, para así poder neutralizarlo.

¿Qué medidas de prevención debemos tomar?

La mayoría de los accidentes se producen dentro de la vivienda, por lo cual las principales medidas de prevención deben estar orientadas a evitar el ingreso de los alacranes:

  • Cubrir con tela metálica los resumideros, y controlar la entrada y salida de cañerías.
  • Colocar burletes en puertas y ventanas.
  • Reparar grietas que puedan encontrarse en paredes y pisos.
  • No acumular basura o escombros y desmalezar los alrededores de la casa
  • Realizar una limpieza cuidadosa y frecuente en la vivienda y alrededores.
  • No caminar descalzo.
  • Sacudir la ropa y el calzado antes de vestirse, y la ropa de cama antes de acostarse.
  • Separar las camas de las paredes.
  • Ante la picadura (o sospecha) se debe acudir de forma inmediata al centro de salud más cercano; y siempre que sea factible, llevar el escorpión vivo o muerto para facilitar la identificación de la especie.

No se debe apretar o perforar el área de la picadura, ni tratar de retirar el veneno con la boca. Tampoco automedicarse ni aplicar remedios caseros sobre la zona afectada.