La legisladora provincial Mariana Caserio se refirió este miércoles a la crisis que repercute en el centro de Punilla por el eventual cierre de Arcoop, la unión de cooperativas que presta el servicio de cloacas en esas localidades.

Advirtió que a partir del fin de la concesión de la Coopi como prestataria del agua en Carlos Paz se desencadenaron situaciones críticas en el resto de Punilla.

“Advertimos desde el primer momento que si desmantelaban la Coopi iba a traer un efecto colateral que lo estamos viendo ahora. No sólo le quitaron el servicio de agua, sino también el de cloacas y la planta de Cuesta Blanca”, sostuvo la legisladora en una recorrida por las ciudades del centro del valle. Y agregó: “La Provincia tiene que hacer un esfuerzo y solucionar este problema que se generó por un capricho político”.

Por otro lado, remarcó que el principal foco debe estar puesto en los trabajadores. “Estamos tratando de intermediar por los trabajadores, que lo que más nos preocupa, y la prestación de un servicio que es elemental” indicó.

Por su parte, el legislador Miguel Maldonado, aseveró que aún no se sabe quién se hará cargo del servicio de cloacas en la región y dijo que la “mayor preocupación pasa por solucionar el problema salarial de los 31 trabajadores de Cuencas Serranas – Arcoop, a los que se les adeuda salarios de mayo y junio, además de los aguinaldos”.

“No hay una decisión tomada y el próximo 28 de julio hay una audiencia de conciliación entre el Gobierno de la Provincia y Arcoop. Estamos trabajando en el tema porque nos preocupa la situación de los empleados, tanto como el servicio”, puntualizó.

Fuente y foto: La Estafeta Online