Rubén Herrero, “Perita”, manejaba el interno de la línea 515 y la gente del barrio Viplastic de Longchamps salió a festejar con él su último día de trabajo. “Hasta ha dejado pasajeros en la puerta de sus casas porque era muy tarde”, recuerda su hijo.

De acuerdo con lo informado por CLARIN, Rubén Herrero, conocido en el barrio como “Perita”, esta semana vivió el resultado de todo lo que brindó tras 31 años trabajando como chofer de la línea de colectivos 515 de Longchamps.

Este lunes 29 de abril fue su último día de trabajo y los vecinos cortaron la calle para festejar con él su jubilación. Durante el encuentro no faltaron los carteles, las ovaciones, los silbidos y bocinazos. “Fue una sorpresa que me hicieron, sentí una felicidad enorme, no pensé nunca que había generado en la gente semejante cariño”, relata “Perita”.

“Perita es el colectivero de nuestro barrio de siempre. La calle se colmó de gente, salimos todos, fue un momento de encuentro muy emocionante. Muchos vivimos hace más de 30 años acá y no nos veíamos hace tiempo, nos encontramos todos en la calle para homenajearlo. Es una gran persona”, dijo Sabrina, una vecina.

“Se merece esto y mucho más, es una persona amable, humana, lo vamos a extrañar, pero se merece este descanso”, le dedicó otra vecina en sus redes.

Incluso el intendente de Almirante Brown, Mariano Cascallares lo felicitó por sus redes. Sus compañeros le entregaron un cuadro de reconocimiento especial.

Un gran compañero

“Es un gran compañero, compartimos más de 30 años de trabajo. Siempre viniendo temprano para preparar sus coches. Yo empecé como chofer con él, se ganó todo lo que la gente hizo el lunes. Mi señora y una amiga de ella, le hicieron la bandera que llevó en el colectivo”, destaca Héctor Cejas, uno de los encargados de la Empresa Transportes del Sur, línea 515.

Una familia numerosa

Rubén tiene una familia numerosa que lo banca en todo. Sus hijos Jessica (31), Gabriel (29) y Nicolás (28) y sus tres nietos: Milena (4), Briana (2) y Bautista (1), presenciaron la celebración y se mostraron muy emocionados por la concurrencia que tuvo su despedida.

“Es un ejemplo de padre, amigo y profesional. Se nos infla el pecho de orgullo, cada mención que le hacen solo habla de lo que él es, una gran persona”, expresó Gabriel.

Y añadió “De mi viejo puedo hablar miles de maravillas. Él es un tipo maravilloso y sobre todo humilde. En mi adolescencia tuve el agrado de poder dar unas vueltas con él en el colectivo y no había un solo pasajero que no lo saludara, que no lo conociera. Tal es así, que muchos no sabían su nombre porque siempre fue “Perita”. Muchos lo conocían desde antes de que estuviera en el colectivo, de chico repartía frutas y verduras por esos barrios. Llegó a llevar al jardín o al colegio a los hijos e hijas de esas personas a las que les repartía frutas. Es una persona increíble, hasta ha dejado pasajeros del colectivo en la puerta de sus casas porque era muy tarde”.

Una nueva etapa

Para esta nueva etapa, “Perita” planea descansar, disfrutar de su familia y salir de pesca con su mujer, Karina. “Mi meta es disfrutar la vida, de mis nietos, porque en el afán de trabajar y de crecer como persona y como familia me perdí muchas cosas de mis hijos y no me quiero perder ningún momento de mis nietos. Con mi esposa nos enloquece salir a pescar, ella es mi pilar y el de la familia, ella es nuestro núcleo”, contó Rubén emocionado.

 

 

Fuente y foto: Clarín