De espectador en Carlos Paz a protagonista en México; ese fue el viaje que hace un par de años emprendió Leónidas Ghione. Radicado en México, el joven siguió sus gustos por la música -la electrónica, en particular-, y llegó a convertirse en un profesional que de poco se fue abriendo caminos no sólo como dj profesional, sino como productor musical.
Leónidas, contó a Carlos Paz Vivo! sobre sus comienzos, estudios, y su presente laboral, teniendo en cuenta que hace escasos meses lanzó “Microcosmos”, su primer álbum como productor musical.
¿Cómo fueron tus comienzos con la música electrónica?
Antes de irme de Carlos Paz tenía un par de años yendo a fiestas electrónicas a bailar, porque me gustaba y me sigue gustando esa parte de la entrega corporal, del baile. Entonces, en un momento me planteé por el tema económico y por la cuestión de crecimiento personal, qué tan bueno era estar debajo de la cabina, o si podía uno siendo músico estar del otro lado. Entonces empecé a comprar vinilos, a aprender la técnica y a juntarme con gente que ya estaba haciendo eso en México, y se dio bastante rápido; en 6 meses tenía todo mi equipo y comencé a practicar todos los días entre 5 y 6 horas.
¿Fue difícil abrirte el camino laboral?
No, fue muy fácil desarrollarme, porque empecé insistentemente a buscar lugares donde proponer mi música. Tengo que ser agradecido porque hay gente que está toda la vida esperando a que se le dé la oportunidad; y yo tuve la suerte de encajar en el lugar y el momento indicado.
¿Se puede hablar de estilos de DJ? ¿Cuál es el tuyo?
Hay 2 estilos. Está al que le gusta mucho la música y lo único que hace es parase detrás de la tornamesa y poner temas; y el dj profesional, que es cuando dejás de ser aquel que comparte música y empezás a manejar efectos y muchas cosas más.
El hecho de poner música como dj conlleva estudiar un poco el manejo. Pero además, si sos productor el panorama de trabajo es muy amplio; como en mi caso, que soy el manager que se contacta con la gente para buscar el espacio, o colaborás con otra gente en la cuestión musical para después usar tu música en los dj sets.
¿Cuál fue el disparador para que comiences a producir tu música?
Después de los primeros cuatro años de estar tocando solamente como dj, sentí como un hueco, una necesidad de superación; entonces me propuse producir enfocado a la electrónica. Ahí me di cuenta que la electrónica no era todo, que podía hacer rock, pop y otros géneros.
¿Cuán complicado es crear?
Me ha tocado dar clases sobre producción musical y me gusta desmentir eso que no es fácil crear. Siento que mucha gente lo pone así para que haya una diferencia entre el que es músico y el que no lo es. Yo trato de inspirar a gente. No es fácil crear, pero todos tenemos la capacidad de hacerlo desde cualquier ámbito y desde las emociones.
¿Ya sacaste un álbum musical?
Sí. Tuve la suerte de que estudiando el Diplomado en Composición Sonora conseguí una beca, una residencia artística en CMMAS (Centro Mexicano para la Música y las Artes Sonoras). Gracias a eso grabé un álbum más por el lado de la acusmática, que es una de las ramas dentro de la electroacústica.
Hice un álbum donde usé poemas de una chica que se llama Jésica Piedras de DF. Y estoy haciendo intermediarios con artistas visuales de México y Argentina, que van a hacer un visual para cada una de las 8 piezas que tiene ese álbum.
Drogas en la música electrónica
Por otro lado, el artista se refirió a lo que a su juicio considera como una estigmatización que se realiza en relación a la música electrónica con la droga.
“Mi punto de vista es que hay una falta de apertura de visión en todos los ámbitos sociales, porque la droga no sólo está en el ámbito de la música electrónica, sino que en todos los ámbitos sociales”, aseveró.
Y Continuó: “También hay drogas legales que son aceptadas, como un Clonazepam o un Valium. Gente tomando alcohol y drogas en las fiestas electrónicas hay mucha; por supuesto que existe. Pero insisto en que la problemática va más allá de una fiesta electrónica o de ir a ver una banda de rock”.
En este sentido, indicó que en Argentina y Latinoamérica en general, se debe apuntar a solucionar los problemas y no sólo a criticar. Y ejemplificó: “En Europa hace como 5 años que hay control de daños. Es una mesa afuera de la fiesta donde te controla gente capacitada. También ayudan hidratando y están preparados por si algo le pasa a la gente”.
