“Me olvidé de un regalo”, parecen transmitir los rostros de los transeúntes que este lunes por la tarde colmaron en el centro de la ciudad y los comercios de las principales avenidas de la villa.
Los comercios aprovechan para pasar la mala racha de un invierno y primavera de crisis aguda en cuanto a la baja de las ventas.
“Todavía no podemos decir si es mayor o menor el volumen de ventas de este año en comparación con el anterior. Seguramente, el miércoles tendremos un panorama más claro”, dijo Sergio, el encargado de un negocio de ropa del centro de la ciudad.
Lo cierto es que el movimiento en áreas como el Centro Viejo fue intenso durante toda la jornada.
La comida, primero
Los almacenes, carnicerías y verdulerías también mostraron una buena cantidad de clientes. En una conocida verdulería ubicada sobre avenida Uruguay hubo largas colas en las cajas durante la mañana.
La Navidad es un momento de encuentro familiar, de reflexión para los creyentes y también un incentivo para las flojas ventas de este 2018 que ya termina.
