Franco y Yamila, dos de las víctimas del accidente de la Colectora.

Yamila Osses es una de las jóvenes que resultó herida en el siniestro vial ocurrido el domingo a la madrugada en la ruta Coletora a la autopista Justiniano Allende Posse. Un automovilista atropelló a cuatro jóvenes y se dio a la fuga. Como consecuencia de las heridas sufridas, el lunes murió Sofía Díaz, de 17 años.

Yamila, quien fue dada de alta y se repone de un fuerte golpe en una de sus piernas, es la novia de Franco Pereyra, quien está internado en el Sanatorio Francés con heridas graves. La joven planteó su reclamo ante la obra social para apurar la llegada de las prótesis que necesita Franco para poder salir adelante.

“Franco está internado en terapia intensiva con fractura de tibia y peroné y ambos fémures quebrados en varias partes, quebradura expuesta, un derrame en la cabeza, por lo que está sedado desde el momento del impacto”, explicó la joven.

“Necesitamos conseguir las prótesis urgente, porque su obra social se las provee recién a los siete días hábiles pero no podemos esperar porque es una cirugía con urgencia. Necesitamos conseguir eso con urgencia”, agregó.

Yamila sostuvo que no se trata de un problema de dinero, porque lo cubre la obra social GEA, si no de burocracia.

¿Qué fue lo que paso?

“Estábamos en el casamiento y decidimos volvernos más temprano porque estábamos cansados y Franco trabajaba”, relató la joven. La pareja había ido junto a un grupo de amigos al casamiento de Camila y Lautaro, una pareja muy cercana a todos. “Lautaro es uno de los integrantes del grupo de amigos de Franco y Jonathan (otro de los heridos).

“Preguntamos si había un lugar cerca y seguro como para ir a buscar un medio de transporte para poder volvernos a nuestros domicilios y nos dijeron que a pocas cuadras estaba la parada”, indicó y agregó: “Como éramos cinco personas, tres varones y dos mujeres, y era poca la distancia, decidimos ir caminando”.

Luego comentó cómo se sucedieron los hechos: “Veníamos hablando, les pregunté a los tres que iban adelante si alguien sabía si faltaba mucho porque tenía mucho frío. Se dan vuelta para responderme y cuando vuelven a mirar para adelante Jonathan y Miguel ya tenían el auto encima”.

“Yo no sentí para nada el impacto. Sólo se que me desperté tirada en la parte de la banquina de la colectora. Ahí empecé a llamar a cada uno por su nombre y no entendía nada de lo que había pasado. Miguel fue quien no perdió la conciencia y nos cuidó a todos, pese a que estábamos lastimados. El volvió a pedir ayuda”, aseguró la joven.

Y detalló: “El auto iba en sentido Carlos Paz-Córdoba. Nosotros veníamos caminando por el lugar que corresponde y ellos vieron el auto a unas cuatro cuadras, pero nadie se iba a imaginar que un auto que viene circulando derecho, en el momento en el que pasa por donde estamos nosotros se le iba a desviar el volante”.

La joven recordó a Sofía, la joven que falleció tras el accidente. “Era pequeñita, era una niña que apenas tenía 17 años. Me había contado que quería terminar el secundario y que quería ser maestra. Era una buena chica, era la novia del mejor amigo de mi novio”.

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