El empresario del espectáculo José Palazzo habló sobre los alcances del DNU presidencial en el sector que representa.
En diálogo con el programa Una de Cal y una de Agüero, que emite Radio Más Rock, Palazzo sostuvo que la restricción horaria determinada por el Gobierno nacional “es un castigo muy grande frente a una situación especial”.
“En mi caso particular y el de muchos empresarios que representamos a la cámara, creemos que la restricción horaria a una actividad como la del teatro y la música que venían demostrando que los comportamientos con protocolos eran ordenados y seguros, es en este momento un castigo muy grande frente a una situación muy especial”, expresó.
Y agregó: “Por supuesto cuando hablamos de mas de 20.000 contagiados las posibilidades de hacer planteos son muy limitadas”.
Palazzo concedió la entrevista en la mañana de este jueves, antes de conocerse la postura del Gobierno provincial que si bien no prohibió los espectáculos, limitó los horarios de apertura.
“Si los espectáculos se hacen en días de la semana la gente tendría que salir de su casa las 17, entrar a un recital a las 18.30 para que termine a las 21 y recién pueda circular hasta las 11”, dijo.
Y apuntó: “Eso limitaría todo y la industria del espectáculo esta viviendo una pandemia aparte como la imposibilidad de generar recursos como en otras épocas ya que los aforos de los lugares a donde se hacen los recitales en ningún caso superan el 25% o el 30% de capacidad”.
Fiestas clandestinas
En cuanto a las fiestas clandestinas, en donde está comprobado que se produce la mayor cantidad de contagios, sostuvo: “El Estado puede controlar limitadamente por que tiene recursos limitados. De hecho si tenés que cerrar 300 fiestas clandestinas necesitas un poder de policía tan grande que por momentos queda superado”; aseguró.
Y añadió: “Por otro lado, y no es un tema menor, existen situaciones que van modificando el humor de la gente a lo largo del tiempo y hoy se instaló lo de las fiestas clandestinas con lo que hoy los jóvenes asisten a fiestas por mucha menos plata que a un bar o a una discoteca”.
Palazzo se preguntó luego: “¿Cómo puede ser que alguien que asiste a una fiesta esté violando una serie protocolos y no haya consecuencias?. De esa manera es muy difícil para la industria del espectáculo y del entretenimiento competir. Todo esto le esta haciendo mucho daño también a la propagación del virus, pueden contagiar a muchos familiares y a la vez también dejan de asistir a otros lugares”.
Pérdidas millonarias
En cuanto a las pérdidas que afrontó el sector, aseguró: “Nuestra compañía en el año 2020 perdió alrededor de 70 millones de pesos, durante todo el parate. El Orfeo se cierra, la Sala del Rey se cierra por que los costos fijos para mantener semejante estructura son muy altos”, expresó el empresario.
“En la Plaza de la Música tenemos un número muy grande de empleados que trabajan en producción o en mantenimiento y también hay varios emprendimientos que funcionan adentro. Fue muy difícil y no despedimos ni a un solo empleado del plantel que tenemos en Vivo Producciones, mantuvimos hasta el último de los colaboradores por que consideramos que forman parte de una cadena de valor muy importante”.
Por otro lado, reiteró que según su opinión, el espectáculo volverá a ser lo que era antes de la pandemia en el mundo y en la Argentina en 2022. “Ese es el año en el que muchas actividades van a volver por completo a su normalidad, el espectáculo va a volver a estar segundo año consecutivo restringido, y esas restricciones que no son solamente de capacidad de la gente en un show, si no también los contenidos”, dijo.
Y agregó: “Córdoba tenía entre 60 y 70 espectáculos internacionales por año , desde chicos, medianos o hasta multitudinarios y en el año 2020 y 2021 el número va a ser cero“.
