En medio del encuentro entre Maccabi Raanana y Maccabi Kiryat Motzkin, el sonido que anunció otro ataque con misiles entre Palestina e Israel fue el determinante para que se suspendiera partido y las imágenes de cómo los protagonistas buscan refugio son sorprendentes.

Momento inquietante en el juego por la permanencia en la segunda división israelí, con público en sus tribunas gracias a la inmunidad casi completa de la población, lo que dejó en evidencia lo que viven las sociedades en guerra.

A falta de siete minutos para finalizar, comenzó a sonar la alarma antimisiles y al instante, los jugadores, entrenadores y árbitros aplicaron el protocolo y se tiraron en el piso hasta que el alerta termine. Algunos espectadores corrieron también hacia fuera del estadio en busca de refugio.