Es una decisión tomada y lo hicieron para combatir la crisis climática. Las autoridades del estado de Florida (EEUU), cuyas palmeras son todo un ícono del lugar a nivel mundial, expresión de un sito donde el sol, la playa y el buen clima reinan, decidieron sacarlas definitivamente.

Las razones son contundentes: “Las palmeras no secuestran carbono al mismo ritmo que los árboles nativos y no brindan sombra, no refrescan las calles y aceras para ayudar a contrarrestar el efecto de isla de calor urbano que ofrece el dosel arbóreo“, dijo Penni Redford, gerente de cambio climático y resiliencia de la ciudad de West Palm Beach a CNN.

A nivel local, muchos sectores de Villa Carlos Paz, principalmente la Costanera, parecen estar inspirados en la costanera de Miami. Nos preguntamos entonces si este cambio, para contribuir al medio ambiente, podrá realizarse también en nuestra ciudad con el propósito de reemplazarlas por árboles autóctonos o nativos.

El enfoque necesario según los especialistas en el tema, se llama “secuestro terrestre de carbono”, que básicamente consiste en plantar árboles, dado que estos lo absorven.

Necesidad de un cambio en cada lugar del planeta

En un contexto de Cumbre COP26 para el Cambio Climático, es clave señalar que nos encontramos con los niveles de dióxido de carbono atmosférico más altos que en cualquier momento en al menos los últimos 800.000 años, según la Oficina Nacional de Administración Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés).

La Tierra debe eliminar el dióxido de carbono, o los humanos deben dejar de agregarlo. De hecho, la última vez que la concentración de dióxido de carbono fue tan alta fue hace más de 3 millones de años.

Trabajo científico

Los científicos trabajan en soluciones para capturar y contener de forma segura el carbono atmosférico. El enfoque “secuestro terrestre de carbono”, hace hincapié en que un árbol absorbe carbono durante la fotosíntesis y lo almacena durante la vida del árbol.

Pero las llamativas palmeras de Florida, -muy probable que también suceda con las de Carlos Paz (un tema a definir por especialistas)– son las menos efectivas para el secuestro de carbono. La palma promedio en el sur de Florida solo absorbe 2,2 kilogramos de CO2 por año.

En comparación con otros árboles —robles, caoba, pinos y cedros— que pueden secuestrar más de 1.360 kilogramos de CO2 durante su vida, puede ser mejor excluir a las palmeras en favor de árboles de hoja ancha o coníferas, según explicaron los científicos del Florida comprometidos con el tema.

Más explicaciones

Otra cuestión que se señala respecto a las palmeras, es que no producen madera, por tal motivo son menos efectivas para almacenar carbono.

Preocupa además, que un vehículo de pasajeros estándar emite alrededor de 4,6 toneladas métricas de CO2 por año, lo que significa que necesitamos muchos árboles para combatir la cantidad de vehículos en las carreteras ¿Y si pensamos estos efectos también en nuestra ciudad turística?

Con información de CNN en español.