La víctima fue encontrada muerta en un auto junto a su pareja, quien intentó suicidarse. El Ministerio Público Fiscal dijo que se trató de una “muerte violenta” e indicó que habría muerto ahorcada.

El caso de Mercedes Kvedaras, la mujer asesinada en Salta por su esposo, aún se encuentra bajo investigación y hay hermetismo por parte de las autoridades alrededor de los avances de la misma. En tanto, el resultado de la autopsia confirmó que la víctima recibió un fuerte golpe en la cara y luego murió ahorcada. 

Desde el Ministerio Público Fiscal de la provincia indicaron cómo fue el femicidio de la víctima, quien fue encontrada sin vida adentro de un auto en un country conocido como El Tipal. “Fue una muerte violenta”, remarcaron.

Los investigadores a cargo de la causa dieron detalles sobre el resultado de la autopsia. El cuerpo de Kvedaras tenía raspadas las rodillas y una herida superficial con arma blanca en la zona baja de la espalda. Además, según informó el medio local El Tribuno, la víctima recibió un fuerte golpe en la cabeza antes de morir ahorcada.

Si bien la fiscalía confirmó la causa de muerte, aún no trascendió la hora del fallecimiento que figura en la autopsia firmada por las dos partes de la causa y los médicos del CIF.

Es por ello que se descartó la primera versión que trascendió sobre el caso, cuando se dijo que Kvedaras había sido apuñalada. Esta hipótesis había sido tenida en cuenta dado que, al momento de encontrar a la víctima a bordo de un vehículo, se hallaron varios charcos de sangre. Posteriormente, se identificó que la sangre encontrada en el vehículo pertenecerían al agresor, José Figueroa, quien intentó quitarse la vida tras el hecho.

El femicidio ocurrió el viernes en el mencionado barrio privado, el cual se ubica sobre la ruta provincial 28 que conecta a la localidad de San Lorenzo con Salta capital.

El lamentable desenlace que terminó con la vida de Mercedes, fue reportado por un amigo del propietario salteño después de que alertara al 911 sobre la desaparición del matrimonio. 

De acuerdo con el testimonio del allegado, que mantuvo su identidad reservada, el femicida le había enviado un mensaje vía WhatsApp para contarle que “no podía con esto”.

Según la información obtenida por El Tribuno, el amigo de Figueroa relató que decidió comunicarse con los servicios de emergencia, ya que tenía conocimiento de que la pareja atravesaba en el último tiempo una crisis matrimonial. Por este motivo, pidió ingresar al barrio cerrado y constató que ninguno se encontraba en el domicilio que poseían en el lugar.

De esta manera, la Policía activó un operativo cerrojo en la zona hasta que en una recorrida por el barrio, el denunciante reportó encontrar a ambos sin signos vitales dentro de un vehículo, estacionado en el terreno de una vivienda vecina. 

La investigación del caso quedó a cargo de la fiscal penal Mónica Poma, perteneciente a la Unidad de Femicidios, quien se presentó en la escena del crimen para verificar y ordenar las tareas a realizar por el resto de los cuerpos de seguridad.

En esta línea, el análisis de las cámaras de seguridad serán claves para determinar el recorrido que el presunto femicida hizo con el cuerpo de la víctima, luego de haberla matado en su propia vivienda.

Los miembros de una unidad del SAMEC fueron quienes constataron la muerte de la mujer, pero alertaron que el agresor aún se encontraba vivo. Figueroa fue trasladado en código rojo al Hospital San Bernardo, en donde fue intervenido quirúrgicamente y se encuentra fuera de peligro.

Interviene en el caso la fiscal penal de la Unidad de Femicidios, Mónica Poma, quien se constituyó en el lugar y luego solicitó la detención de Figueroa ante el Juzgado de Garantías en turno.

 

Fuente y foto: Infobae