El presidente albiazul dio parte a la policía y a la Justicia. La sospecha recae sobre la barra brava de Central que pretende que el defensor vaya al club de sus amores, una negociacion que aún está frenada.

El presidente de Talleres, Andrés Fassi, denunció ante la policía y la Justicia, que en los ultimos tres días recibió más de 80 amenazas de muerte telefónicas, destinadas a él, sus hijos y familia, relacionadas a su decisión de no autorizar la concreción del pase. Y sospecha que provienen de barras del club canalla.

Además de las denuncias, Fassi dio cuenta de la situación a la Liga Profesional y al presidente de la AFA, Claudio Tapia, y por sugerencia de la autoridad policiales y judiciales, no realizará declaraciones sobre las amenazas.

El caso Komar se inició con la presión del jugador para salir a Central, cuya oferta no satisfizo a Talleres. El capitán albiazul dejó la concentración y se marchó a Rosario.