El Día D: El transplante de corazón le permitió empezar de nuevo a Lorena y su familia.

Todos los 6 de junio la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) celebra el Día Mundial de los Pacientes Trasplantados. El objetivo de este día es concientizar y promulgar una cultura de donación de órganos. La importancia de la donación de órganos radica en brindar una oportunidad de vida a pacientes que padecen enfermedades crónicas o terminales.

Carlos Paz Vivo charló con con Lorena Cervellini, una vecina de Tantin, de 47 años, que fue trasplantada de corazón en el año 2019. En primera persona cuenta su experiencia y transmite un importante mensaje sobre la donación de órganos.

-¿Qué representa para vos haber transitado un trasplante?

-Para mí, estar trasplantada es haber recibido la mejor oportunidad que me dieron en la vida. Es la oportunidad de ser feliz, de poder vivir junto a mi familia, de ver crecer a mis hijos. Puedo ver cómo ellos forman su familia, puedo acompañarlos y estar de una forma completamente diferente de lo que era antes. Pude abrir puertas e insertarme laboralmente, me permitió poder trabajar y crear mi emprendimiento. Ahora puedo decir “soy útil”. Puedo compartir con mi familia tantas cosas que antes no podíamos, ya que la salud no me lo permitía, salimos a caminata por el río. Ahora no tenemos el temor de salir y sentir presión. Antes, en mi familia existía el miedo permanente de que algo me pasara, de que me sintiera mal. Todo eso quedó atrás y eso es lo que me permitió el trasplante. Hoy estoy eternamente agradecida al donante y a todos los donantes que permiten esto en un montón de personas.

-¿Cómo fue tu experiencia personal?

-Me trasplantaron el 5 de octubre 2019, de corazón, hace tres años y ocho meses ya. Una vez que entré a la lista de espera, estuve un año y un mes aproximadamente esperando. Lo que ocurrió es que a mí me tuvieron que poner en emergencia nacional, porque yo cada vez estaba peor. Ocho días antes de recibir el órgano yo estuve conectada, en estado crítico, a un corazón y a un pulmón artificial. Esos fueron los tiempos de espera y mi estado mientras esperaba si llegaba ese donante, ese corazón que yo tanto necesitaba.

-¿Cuál es tu mensaje para aquellos que están en la espera de un órgano para salvar su vida?

-A todos los que están en lista de espera les diría que nunca bajen los brazos, que siempre crean hasta las últimas instancias. Les diría que estén dispuestos a aceptar ese órgano que va a llegar, que confíen plenamente en su equipo de médicos. Además, que se apoyen mucho en su familia, en sus amigos, en la gente cercana que tienen. Todos ellos son los que siguen dando la fuerza y siempre están para apoyarte. Yo creo, que eso es sumamente importante, para mí fue trascendental el apoyo que todos me dieron. Mi mensaje es que todo va a estar bien y que se puede salir adelante. Después del trasplante, les espera una vida maravillosa.

-¿Qué le dirías a la sociedad sobre el trasplante de órganos?

Hoy necesitamos una sociedad que esté abierta a querer donar. Es muy importante para los miles de personas que están hoy esperando un órgano. Esas personas, muchas veces tienen una calidad de vida muy, muy delicada. Hoy más que nunca necesitamos que la sociedad diga “Si” a la donación de órganos. Es sumamente importante transmitir siempre: “la donación de órganos salva vidas”.

 

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