Por Silvia Reynoso. Repasando…En el año 2017, el ENOHSA (Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento) se comprometió con nosotros al otorgamiento de un crédito para la construcción de redes cloacales. En febrero de 2018 el intendente Esteban Avilés viajó personalmente a Buenos Aires para aceitar la gestión, pues según se informó, se habían cumplimentado los requisitos formales, técnicos y económicos. El Gobierno Provincial sería quien avalara la solicitud, convirtiéndose, por lo tanto, en garante de pago. Estamos hablando de casi alrededor de 170 millones de pesos, que pasarían a ser una deuda municipal, pero bien invertida (a diferencia de la que tenemos hoy, a nivel nacional, con el FMI).
En el mes de mayo de 2018, la concejal Carla Livelli nos notificaba que el Concejo había aprobado el Convenio con dicho Ente Nacional y que nuestra ciudad estaba en condiciones de licitar la obra, una vez que se firmara el mismo. El objetivo era “comenzar con dichas obras de redes cloacales en el mes de octubre de 2018, para terminar con los trabajos en el primer anillo de prestaciones, y de esta forma cumplir con una deuda histórica que se mantiene con los vecinos de Carlos Paz”. Sus expresiones hablaron de un “subsidio” cuando en realidad se trataría de un “préstamo”, que no es lo mismo.
Tiempo después, Horacio Pedrone ante la necesidad de dar respuestas sobre el tema, expresó que “la gestión no estaba caída, pero atento a la situación que estaba atravesando el Gobierno nacional” se había “freezado”. Es decir, hubo en ese momento un reconocimiento de parte del Gobierno municipal, como tantas veces, de que el contexto nacional no nos estaba favoreciendo, pero aun así nos transmitía un mensaje de esperanza.
Desde mi punto de vista, la realidad era que Mauricio Macri ya había cerrado las puertas a tal posibilidad. Es que la Nación para esa fecha ya tenía órdenes del FMI de no bajar dinero a las provincias, mucho menos a los municipios, lo prioritario era cumplir con sus pautas, exigencias y con el ajuste que plenamente se ejecutaba en todo el territorio nacional. Cuando existe voluntad política, la misma fluye y se concreta. Tanto tiempo, ya nos estaba indicando que el Lago San Roque no estaba en la cabeza del Presidente.
Ni subsidio, ni préstamo.
El exintendente Avilés confirmó el día 17 de diciembre de 2018, lo que muchos sabíamos (y pocos decíamos): Macri no iba a hacer nada por nuestro Lago, nuestro embalse, sencillamente porque su modelo de gobierno no nos incluye, ni a nosotros ni a la gran mayoría de los argentinos.
“Nos mandaron a aprobar la ordenanza, dos años nos patearon, es una irresponsabilidad, hay que decir sí o no”. “La solución definitiva es lo que está planteando el gobernador que salió a buscar este financiamiento como si fuera presidente. A esto lo debería haber hecho el presidente”.
De este modo, el exintendente Avilés dejaba claro que Macri, al igual que con el resto de los argentinos, no cumpliría su palabra, a pesar del 75% de votos que Villa Carlos Paz le otorgó en 2015.
La respuesta al Defensor del Pueblo… sabor a nada.
“El Gobierno Nacional nos informó haberse puesto en contacto con el Ministerio de Agua, Ambiente y Servicios Públicos de la Provincia de Córdoba, a los fines de poner a disposición personal técnico para prestar la asistencia necesaria”. Comunicado informativo de fecha septiembre de 2019
“Lo vamos a matar de amor”, pero el que muere literalmente es el Lago.
La columna pretende reflexión y razonamiento, no es simplemente una información de los hechos. Los dirigentes radicales salieron todos a convocar a la ciudadanía para que nos acerquemos a recibir las flores que nos traía Macri. Flores y mucho amor, pero que no alcanza al Lago, que como testigo y escaso consuelo, vio cómo la convocatoria, no fue la esperada. Quizás el mal tiempo, quizás defraudados o con conciencia, los vecinos prefirieron quedarse en sus casas.
La Planta de Tratamiento de líquidos cloacales que se inauguró durante la gestión de Carlos Felpeto (uno de los pocos conciudadanos beneficiados por el gobierno de Macri) con fondos nacionales y bajo la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, sólo funciona al 35% de su capacidad. Hoy en día sabemos que parte de la obra de cloacas se realizará con fondos municipales y otra parte, con fondos provinciales. El desafío es trabajar y gestionar, para que su totalidad, llegue de la mano del próximo gobierno, excepto que Macri, ante el comportamiento y fidelidad de la UCR local, tenga un gesto de grandeza con nosotros y anuncie en los próximos días, antes del 27 de octubre, que se firma el Convenio aprobado en mayo de 2018, por el Concejo de Representantes, lo que no sería legal, por encontrarse en campaña. Improbable ante el contexto nacional deplorable que estamos viviendo.
Silvia Reynoso es contadora. Hasta setiembre de 2019 estuvo a cargo de la Casa de la Mujer durante el segundo mandato de intendente de Esteban Avilés.
