Desde 1974, Argentina conmemora a los profesionales que analizan los estados conscientes, así como sus orígenes y los efectos en cada paciente.

Cada 13 de octubre, a nivel nacional, se festeja el Día del Psicólogo en referencia a los profesionales de la salud mental cuya labor tiene una gran incidencia en la Argentina.

Esta fecha se instauró en 1974 por el Primer Encuentro Nacional de Psicólogos y Estudiantes de Psicología, que se celebró en la ciudad de Córdoba. Se llevó adelante una iniciativa de la Confederación de Psicólogos de República Argentina (CoPRA), bajo el objetivo de pensar y trabajar por los derechos de los psicólogos, construir una identidad profesional y donde miles de expertos y estudiantes de todo el país unieron sus fuerzas en defensa de la psicología.

Por otra parte, en 1977, CoPRA se transformó en la Federación de Psicólogos de la República Argentina (FEPRA), la cual continúa en vigencia hasta la actualidad.

La meta principal de la institución es “lograr la inserción de la psicología en todos los órdenes de la vida cotidiana en un estado de derecho”. Por ello, se apuesta a “promover una mejor calidad de vida de la población” mediante el ejercicio profesional en conjunto.

Respecto al origen de esta ciencia social -que analiza y estudia los procesos mentales, las sensaciones, las percepciones y el comportamiento del ser humano, en relación con el medio ambiente físico y social que lo rodea-, se remonta a los filósofos de la antigüedad como Sócrates, Platón y Aristóteles. Una serie de referentes que fueron precursores por reflexionar sobre el alma humana y su modo de relacionarse con el mundo.

Luego, vinieron varios autores destacados como Santo Tomás de Aquino en la Edad Media, Descartes en el Renacimiento, Christian Wolf e Immanuel Kant, por mencionar a algunos. Sin embargo, el punto de inflexión fue en el siglo XIX cuando se asoció con la fisiología e implementó nuevos métodos de medida.

Unos años más tarde, en 1879, surgió en Alemania la psicología experimental con Wundt, quien fundó el primer laboratorio de psicología experimental. Desde entonces, se separó la filosofía y la psicología.