Cada 5 de mayo se conmemora el Día del Celíaco, una fecha instaurada para visibilizar la enfermedad celíaca y concientizar sobre las dificultades que enfrentan quienes deben mantener una dieta estricta libre de gluten.
Esta condición, que implica una intolerancia permanente al trigo, avena, cebada y centeno (TACC), no solo representa un desafío para la salud, sino también un fuerte impacto en el bolsillo.
Según el último informe de la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Córdoba, el costo de alimentarse adecuadamente para una persona con celiaquía es cada vez más alto. En febrero de 2025, una persona celíaca necesitó $ 44.282 adicionales respecto de alguien sin esta condición, lo que representa un 30,69% más de gasto mensual en alimentos.
Uno de los productos más emblemáticos para reflejar esta disparidad es el pan: mientras el kilo de pan francés costó en promedio $ 2.700 en febrero, elaborar un kilo de pan sin TACC demandó $ 4.690, un 73,7% más caro. Este ejemplo expone las exigencias y limitaciones que enfrentan quienes deben modificar radicalmente su dieta.
Los productos que más encarecen la canasta celíaca son las harinas y las legumbres, que representan el 39,16% del total. Esto se debe a que muchos de los productos habituales deben ser reemplazados por versiones específicas, lo que eleva significativamente el costo mensual.
Un bono que no alcanza
Josefina Van Der Laan vive en Bialet Massé pero este 5 de mayo su pareja le regaló un desayuno en el gastrobar Kiwi, el único que cuenta con carta con menús con y sin TACC, ambos al mismo precio.
En diálogo con Carlos Paz Vivo! Josefina contó que le descubrieron que era celíaca luego de años sufriendo problemas de gastroenteritis a los 57 años de edad. “Llegué a pesar 48 kilos porque todo me caída mal. Me diagnosticaron la celiaquía luego de una endoscopía. Se cree que lo tuve de nacimiento pero se despertó por algún hecho en particular, de estrés quizás. Desde entonces cumplo con el regímen sin TACC a rajatabla”, expresó.
Además, contó que se fijó al fecha del 5 de mayo para concientizar sobre esta condición que afecta a muchas personas, sabiendo que ocho de cada diez celíacos en Argentina no fueron diagnosticados. Pero también para visibilizar el pedido que realizan para que los celíacos pueden comprar alimentos sin TACC sin el 21% de IVA y exigir a la vez precios justos, señalando que los productos sin gluten “son una necesidad, no un lujo”.
Cabe recordar que existe el “bono para celíacos”, un subsidio económico mensual que otorga PAMI (Programa de Asistencia Médica y Aseguramiento de la Salud de la Nación) a jubilados, pensionados y otros afiliados que padecen celiaquía.
Sin embargo, Josefina asegura que este subsidio -actualmente de $38.154,60- apenas ayuda a cubrir los costos de harinas y premezclas sin gluten y que cubrir la canasta básica sin TACC es cada vez más difícil.